Parasitosis infantil: síntomas y tratamiento

Algunos niños son propensos a tener lombrices, parásitos a los que se conoce como Oxiuros que provocan una infección y afectan a todo tipo de personas, en especial a los más pequeños.  
Los parásitos son muy comunes y, a pesar que no producen un daño serio, es imporante eliminarlos, puesto que además de  incómodos son antihigiénicos.
El ciclo de vida de los parásitos es el siguiente: empieza como un huevo del cual nace una lombriz, que durante su etapa adulta adopta la forma de un hilo blanco que no supera 1 centímetro de longitud. Habitan en los intestinos pero por las noches se trasladan hacia la zona del ano para colocar sus huevos, generándole al pequeño irritación, incomodidad y picazón, síntomas que dan cuenta de su presencia. Al rascarse, los huevos de los oxiuros acaban depositándose entre los dedos del niño, corriendo el riesgo de ingesta al llevarse la mano a la boca. Es de este modo como los huevos se alojan en la parte superior del intestino, donse se desarrollan, reproducen y, tras un periodo de unas dos semanas, empiezan nuevamente el mismo ciclo. Dicho esto, es muy fácil deducir que las lombrices son muy contagiosas, pasando los huevos de un niño a otro con facilidad, sobre todo al compartir el baño, la ropa, los juguetes o la cama, de modo que todo el grupo familiar es posible que contraiga parásitos. En este caso, hay que consultar con el pediatra para iniciar el tratamiento y adoptar mayores medidas de higiene en la casa.
Actualmente, hay diversos tratamientos que son efectivos para combatir los parásitos, aunque no existe ninguno que sea capaz de destruir los huevos. Por consiguiente, luego de dos semanas de haber tomado la primera dosis es necesario repetirla.  Si los parásitos vuelven a aparecer, lo más seguro es que se trate de una reinfección y no de un defecto del tratamiento, por lo que hay que comenzarlo de nuevo.
Al margen del tratamiento, es importante inculcarle a los niños el hábito de lavarse las manos con frecuencia, además de mantener las uñas cortas y bien limpias. Además, todo aquello que esté en contacto con ese niño, como toallas, sábanas, ropa y juguetes, sea lavado con agua caliente ni bien comience a tomar la medicación para eliminar los huevos.

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