Existen muchas razones por las que lloran los bebés, pero no tiene por qué ser algo malo. Lloran, es algo inevitable, como lo que sucede cuando somos mayores a veces y no es posible controlarlo. Por eso, no debe ser motivo de preocupación extrema para las madres.
Además, hay que tener en cuenta que, no sólo existen causas de alerta por las que lloran, aunque hoy será especialmente en las que nos vamos a centrar. El caso más habitual que nos vamos a encontrar es que está cansado y necesita dormir, pero ¿cómo identificar cuando el llanto se refiere a uno u otro motivo?
Bostezos e inquietud
Se trata de dos síntomas característicos que podemos localizar en el pequeño cuando tiene sueño, por eso, al menor síntoma hay que tratar de acostarlo, porque hay bebés que se ponen especialmente irritables cuando no consiguen quedarse dormidos. Y la cosa no es tan sencilla como parece.
Además, la inquietud también puede manifestarse cuando tienen hambre. Si lloran y están inquietos y pensamos que no es por cansancio, puede ser por esto mismo. Observemos si hace algún tipo de chasquido con la boca o si sigue tu mano al acercarla a su mejilla.
Serán indicaciones que pueden ayudarnos a saber que nuestro bebé tiene hambre. En caso de llorar y no manifestar estos indicios, puede ser que tenga el pañal sucio o, que tras la comida, necesita echar un gas. Atención también si son propensos a tener cólicos, porque el llanto también lo manifestarán por este motivo.
Malcriarlo por cogerlo al llorar
En ocasiones pensamos que si llora porque reclama nuestra atención y lo calmamos es algo negativo. En parte sí, porque lo acostumbramos a tener esa protección constante y se pueden hacer dependientes de nosotros. Piensa que perciben tu olor, el sonido de tu voz, los latidos de tu corazón, de forma especial, y eso les calma y les da cobijo.
Sin embargo, cuando se es madre, es complicado no hacerse eco de los llantos de nuestro pequeño. Los sentimos como propios y queremos aliviarle el mal rato que están pasando. Eso ya, va en consonancia con el tipo de madre y de educación que queramos ofrecerle.