Últimamente han proliferado a través de Internet, diferentes test en donde se te hacen todo tipo de preguntas para saber si estás o no preparada para ser madre. ¿Son efectivo? ¿Reflejan la realidad? En realidad no. Si investigamos a través de la web nos encontraremos diferentes tipos de páginas.
Algunas te conciencian sobre las consecuencias que tiene tener un hijo: la reducción del tiempo para una misma, las preocupaciones, la parte económica… Aunque lo habitual es que este tipo de encuestas se centren en hablarte de productos y de cosas muy superficiales, entonces ¿cómo saber si estoy o no preparada para ser madre?
Cuestión interior y valores en común
Se dice que a todas las mujeres, antes o después, les llega el deseo de convertirse en madres. Sin embargo, no es algo que deba convertirse en una obsesión, ni en un sentido ni en el otro. Al final, todo depende del momento y de la necesidad que tengamos de ponernos en marcha.
Al final se trata de una responsabilidad más que asumimos. Por ello, debe ser algo que meditemos y a lo que dediquemos tiempo. Debemos evaluar muchas variables y todas ellas son importantes para llegar a la conclusión final de si ha llegado ya el momento o no. A pesar de ello, si queremos encontrar excusas para no tener hijos, las encontraremos.
Y es que, se trata de un cambio radical y que durará el resto de nuestras vidas. Por eso, es muy recomendable que no solamente te prepares tú y te conciencies, sino que sea algo que hagáis en común tú y tu pareja. Es importante buscar información y consejos al respecto y también buscar quién pueda resolver tus dudas a cerca del embarazo especialmente.
Emociones a flor de piel
Se trata de algo que te alterará los biorritmos y las hormonas y que, en muchos casos, conlleva a importantes crisis en la pareja. Por eso es importante que la decisión sea de ambos y que las dos partes se respeten llegado al caso de tener que posponer la decisión un tiempo, porque uno de los dos no lo tiene claro o no cree que aún haya llegado el mejor momento.
La realidad es que, como decimos, es algo para toda la vida, por lo que es mejor esperar unos años que complicarte una situación actual de pareja que va viento en popa, por precipitar demasiado las cosas.