Obligar a los niños a compartir sus juguetes no sería positivo para ellos. Al menos así lo sostiene un grupo de expertos de la Universidad de Cornell (Estados Unidos), quienes a través de una curiosa investigación determinaron que los niños serán más generosos a futuro si se les da la posibilidad de elegir y respetar su decisión.
Ahora bien, ¿qué padre no ha instado a sus hijos a que compartan los juguetes con el propósito de inculcarles generosidad y que a futuro sean más sociables? Sin embargo, los investigadores establecieron que dicha acción no arrojaría resultados positivos a largo plazo.
Según los expertos, darles la posibilidad a los niños de elegir si desean o no compartir los juguetes es más beneficioso, pues de ese modo los pequeños logran percibirse a sí mismos como personas a las cuales les agrada compartir, tornándose más propensos a la sociabilidad en un futuro. De lo contrario, si el hecho de compartir no es una opción sino más bien una obligación, esto acabará repercutiendo con el tiempo en su conducta social.
Para arribar a esta conclusión, los expertos analizaron a tres grupos de niños de entre 3 y 5 años de edad. Al primer grupo se le dio la opción de compartir los juguetes con otros noños, al segundo se le ofreció la posibilidad de compartir solamente uno de los juguetes, mientras que el tercer grupo fue obligado a compartir la totalidad de los juguetes. Así, lograron establecer que aquellos niños que son obligados a compartir no querrán hacerlo nuevamente, ya que tampoco tendrán la necesidad de hacerlo. No obstante, quienes tengan la libertad de elegir compartirlos, no solamente serán más generosos sino que además tenderán a repetir la acción en otro momento.