Cómo colocar el pecho

colocacion pecho lactanciaHay que tener en cuenta una serie de cosas cuando le damos el pecho a nuestro pequeño, para que el momento de mamar no sea un problema. Lo primero, debemos levantar a nuestro pequeño “tripa a tripa”, de forma que no tenga la necesidad de girar la cabeza para poder llegar al pezón. Debemos agarrar el pecho con el pulgar hacia arriba y los dedos, justo por debajo, en la zona que hay por detrás de la aureola. Debemos esperar que nuestro pequeño abra la boca, de par en par. En ese momento, debemos acercar el pecho al niño. Debemos asegurarnos de que nuestro pequeño toma el pezón y buena parte de la superficie de la areola en su boca. Si todo está correcto el bebé va a mamar con la boca abierta y con su nariz y el mentón, que estén bien pegaditos, a nuestro pecho.

El labio inferior de la criatura debe estar vuelto hacia abajo. Debemos evitar que nuestro pequeño mame estando alejado o en una posición en la que sólo chupe el pecho y en la que la boca esté poco abierta. Así, su nariz no está rozando el pecho.

Si nuestro bebé mama de forma incorrecta tendrá lugar una serie de molestias o inconveniencias, que no son muy aconsejables, como son: los pezones doloridos y agrietados, la baja producción de leche o los pechos duros y doloridos. Por tanto, debemos tener cuidado a la hora de controlar la postura de nuestro bebé al mamar. Una posición correcta trae consigo unos pezones sanos, una succión eficaz y que nuestro bebé esté feliz.

Los pezones doloridos

Cuando estamos dando el pecho, nos encontramos que muchas mujeres podrían tener molestias, que se conoce como pezones doloridos. Y, también, suelen aparecer grietas, que son bastante molestas. Todo esto nos está indicando que la colocación del bebé al darle el pecho. Algunas de las cosas que podemos tener en cuenta para evitar estas dolencias, o hacer que sean menores, son: cuando nos duchemos, debemos lavar el pecho sólo con agua, no debemos usar ni jabones, ni alcohol, ni ningún tipo de producto, que pueda provocar que nuestra piel se reseque. Antes de las tomas, no es necesario que lavemos nuestro pecho, no pasa nada si no lo hacemos.pezones doloridos

Si no empleamos jabón o materiales químicos, evitaremos que la piel se reseque. Si se producen grietas no debemos utilizar cremas que puedan provocar que tengamos que volver a lavar nuestro pecho, otra vez, con agua, cada vez que nuestro pequeño quiera tomar el pecho. La mejor manera de tratar este problema es aplicar unas gotas de nuestra propia leche sobre el propio pezón y la zona de la areola, tras las tomas, y dejar que nuestros pezones se puedan secar al aire. Nuestra propia leche hará que la piel se hidrate -ya que las grietas vienen provocadas, en muchas ocasiones, por culpa de la deshidratación de la propia piel, que en esa zona del cuerpo es muy fina-.

También, debemos evitar las pezoneras de siliconas, que lo único que hace es confundir la succión del bebé y hacer que nuestro pecho no reciba el estímulo que necesita, para poder producir la leche.