¿Cuándo comienzan a sentirse las pataditas del bebé?

Todas las embarazadas ansian que llegue el día en el que puedan comenzar a sentir las pataditas de su hijo. Aunque lo cierto es que el bebé se mueve en el interior de la panza desde que es tan solo una pequeña célula. Las pataditas indican que el bebé está bien y continúa creciendo, a la vez que reafirman, sin, dudas, el lazo emocional entre madre e hijo.

El feto comienza a dar pataditas desde el momento mismo en el que le brotan los brazos y las piernas, que es en torno a la semana 8. Pero la madre no lo percibirá hasta que éstos crezcan y posean la fuerza necesaria, pues para sentirlas el pequeño deberá mover las paredes del útero, las cuales se encuentran en contacto con la pared del abdomen.

Aquellas mujeres que ya han tenido un embarazo previo, puede que comiencen a sentir las pataditas entre la semana 20 y la 24. En el caso de las primerizas, éstas las notan más tarde debido a que el útero y la pared abdominal no tuvieron la extensión del primer embarazo. De todos modos, desde esa primera vez las futuras mamás percibirán los movimientos de su bebé a diario.

A las mujeres que estén transitando su primer embarazo, quizás les cueste distinguir al principio los movimientos fetales de los intestinales. La mayor parte de las embarazadas describen esa sensación como un pez nadando en su interior.

Las patadas del feto son señal de que todo marcha bien. Por eso es necesario estar atentas a ellas, puesto que si no se mueve estaría indicando de que algo ocurre.

Otra de las cuestiones que se suelen oír es que las patadas refuerzan el vínculo con el bebé, porque las embarazadas logran sentir que su hijo está creciendo en su interior.  De modo que al notarlas se establece la primera relación entre la madre y  la criatura.

En tanto que para el padre, las pataditas le hacen  aflorar un instinto paternal cada vez que toca el vientre de la madre y percibe los movimientos fetales. Una sensación parecida es la que experimentan los hermanos.

Imagen:

http://www.bebes.net/wp-content/uploads/2010/05/padre-habla-vientre-.jpg

Los movimientos del bebé en el vientre materno

Los movimientos fetales empiezan a percibirse entre las semanas 18 y 24 de gestación.
Por lo general, las famosas «pataditas» del bebé son percibidas por la embarazada cuando reduce la actividad y permanece acostada. Usualmente, esto ocurre durante la noche, cuando se está más atenta a los cambios de posición del bebé.
Los primeros movimientos del bebé, se sienten como vibraciones o como una sensación de burbujeo dentro de la panza.
A medida que el embarazo avanza, los movimientos pueden ser identificados de manera más clara e, incluso, es posible visualizar alguna parte de su cuerpo, como un codo, un talón o la cola, o percibir que el bebé se está moviendo para cambiar de posición.
En algunos casos, el bebé se moverá como respuesta a un estímulo específico, como es el caso de la música, un sonido o las emociones.
Es a partir de la semana 24 cuando el bebé puede tener hipo. En caso de que esto ocurra,  la mamá sentirá en el vientre leves y pequeños espasmos involuntarios y repetitivos.
Acercándose al final del embarazo, los movimientos tenderán a ser menos intensos y más definidos, debido a que el bebé cuenta con menos lugar para moverse.
Desde la semana 28 es de suma importancia reconocer y percibir cuando el bebé se esté moviendo. Un método casero que sirve para sentir los movimientos del bebé es comer o tomar algo dulce, aguardar unos minutos y recostarse, ya que en esa posición pueden distinguirse los movimientos con mayor claridad.
En caso que poseas la más mínima duda o sospecha de que el bebé ha pasado varias horas sin moverse, es importante que acudas al médico con celeridad para que pueda evaluar, a través de un ultrasonido o monitoreo, el estado de salud del bebé.

Foto