Beneficios de la matronatación

La natación para bebés, conocida también como matronatación, representa una de las actividades más recomendadas durante los primeros años de vida de todo niño, debido a sus amplios beneficios. Básicamente, se trata de una actividad que además de ejercicio brinda placer, diversión y estímulo para el niño.
En verdad, la natación para bebés no se relaciona mucho con la natación tal como la conocemos puesto que un niño recién podrá aprender a nadar como un adulto desde los 4 o 5 años de edad. Por lo tanto, lo que se plantea es que el bebé se maneje con confianza y comodidad dentro del agua y desarrolle a pleno sus capacidades motoras, ejercitando tanto sus músculos como sus extremidades, permitiéndole a su organismo un desarrollo más saludable.
Los niños menores de 5 años son muy pequeños para desarrollar una propia autonomía en el agua y adquirir todos los movimientos característicos de la natación que le permitan valerse por sus propios medios en cualquier situación, por lo que bajo ningún concepto debe dejarse a un bebé en el agua sin la presencia y el respaldo de un adulto responsable.
Los recién nacidos poseen una importante cantidad de reflejos que les posibilitan el desarrollo de una adecuada adaptación al agua. De ahí que es posible apreciar  cómo disfrutan de cualquier actividad que se les proponga en la piscina, siendo de gran ayuda para su crecimiento.
Al mismo tiempo, practicando natación el niño también puede desarrollar un vínculo de amor y confianza muy cercano con el adulto que lo acompañe, ya sea el padre o la madre, pues en todo el proceso se comparte una experiencia sin igual y memorable. Incluso, el niño que realiza este deporte se vuelve más fuerte y atlético, reduciendo a a su vez el riesgo de padecer obesidad infantil.

Imagen:

http://www.matronatacion.com.ar

Obesidad infantil, la importancia de la lactancia materna

Obesidad infantil, la importancia de la lactancia materna

Mucho es lo que se estudia a diario sobre maternidad y lactancia materna, y grandes investigadores dedican su tiempo para dejarnos en claro la gran importancia que tiene el amamantar a nuestros bebés los primeros meses de vida, sobre todo para prevenir enfermedades a largo plazo.

Así es que desde hace algún tiempo muchos investigadores sostienen que la lactancia materna tiene una gran relación con el posible desarrollo de un bebé, para prevenir enfermedades como la obesidad y el sobrepeso, ya que sostienen que aquello pequeños alimentados con leche materna, tienen menos posibilidades de ser obesos en su primera infancia, adolescencia y vida adulta.

Teniendo presente esto lo más recomendable para una mamá que acaba de tener familia, es que responsablemente estimule su producción de leche, ya sea prendiendo al bebé a la teta , cada vez que él lo solicita o mediante un sacaleches, para luego brindarle el alimento con una mamadera, dado que éste alimento es fundamental e indispensable para que correcto y saludable desarrollo de un bebé.

Hay que recordar que amamantar a un bebé, es un gran trabajo por parte de la mamá, pero bajo ningún punto de vista cabe privarlo de semejante privilegio si tenemos en cuenta todos los beneficios que la misma le proporciona a largo plazo. Por lo tanto la teta, debe ser a libre demanda, o sea, cada vez que el niño lo solicite y tenga hambre. La combinación con leches de fórmulas es aceptada, pero se recomienda que al menos los 6 primeros meses, el pequeño tenga como alimento exclusivo la leche materna acompañada por las indicaciones que brinda el pediatra de confianza.