El «Oro líquido» así a sido apodado al calostro por varios especialistas por su gran importancia en la lactancia materna.
El calostro comienza a elaborarse en los pechos de las mujeres durante el quinto o sexto mes de embarazo, para estar listo para la ingesta del bebé en su nacimiento.
Algunas de las características que tiene el calostro son que contiene una composición alta en IgA, inmunoglobulina y agente antiinfeccioso; esto significa que tiene todo lo necesario que un bebé necesita para defender su salud durante los primeros días de su vida. De ahí que los especialistas lo llaman el «Oro líquido«.
El sabor del calostro es muy similar a del liquido amniótico, así que el bebé no sentirá ninguna clase de rechazo por su gusto, ya que el bebé está acostumbrado a ingerirlo y sentirá una continuidad luego del parto.
El calostro se va modificando con el paso de los días y va modificando su composición para beneficiar el crecimiento del bebé, esto sucede despues de los cinco o seis días posteriores al parto. Convirtiendose en una leche de transición más acuosa que la que tomará el bebé en forma definitiva.
Esta leche de transición posee características del calostro y de la leche materna definitiva, esta etápa dura aproximadamente 2 o 3 semanas.