Falsa regla en la etapa inicial del embarazo

Durante la etapa inicial del embarazo, hay mujeres que menstrúan o tienen pérdidas, lo cual puede confundirse con el ciclo menstrual. Por lo general, las embarazadas dejan de tener la regla, por lo que este falso sangrado se produce por motivos diferentes, que nada tienen que ver con la ovulación.
Tales alteraciones pueden darse, por ejemplo, por tener un ciclo menstrual regular. Hay mujeres que pueden tener la regla a pesar de estar embarazadas. Esto, normalmente, sucede cuando una mujer queda embarazada cerca del inicio de su próximo período menstrual. Lo cual, puede generar confusión al momento de definir la fecha del parto.
Por su parte, el embarazo ectópico también puede provocar sangrado semejante al flujo menstrual o regla. El embarazo ectópico ocurre cuando un óvulo fertilizado es implantado en un órgano que no es el útero, como pueden ser las trompas de falopio. Esto puede producir daños de órganos o, incluso, abortos espontáneos. Para definir si el sangrado se debe a un embarazo de esta naturaleza, lo más conveniente es acudir al médico.
También, la presencia de sangrado se puede deber a un aborto espontáneo. Un dato que pocos conocen es que tan solo un 25% de las gestaciones llegan a buen término. Si estás embarazada y tienes calambres y sangrados, podrías estar sufriendo un aborto espontáneo. Ante la menor duda, consulta con tu médico de confianza.
Los problemas en la placenta, como la placenta previa y desprendimiento prematuro de la placenta, pueden producir sangrado aunque estas alteraciones únicamente se dan en un embarazo avanzado. La placenta previa es cuando esta cubre de forma parcial o total el cuello del útero o el espacio por el que el bebé debe salir. En tanto que el desprendimiento ocurre cuando la placenta se suelta de manera prematura de la pared uterina.
Por último, valen mencionar las hemorragias típicas del primer trimestre, debido a lo cual muchas mujeres poseen leves sangrados durante los primeros meses de gestación. En este caso, la sangre es poca y de un color rosáceo o marrón.
De todos modos, si estás embarazada y tienes sangrado, lo mejor es consultar de forma inmediata con tu médico para descartar cualquier tipo de complicación.

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Planificar el embarazo

A la hora de pensar en comenzar a buscar un embarazo, es preciso tener en cuenta una serie de recomendaciones.
En primer lugar, es muy importante realizar una  consulta con el ginecólogo antes de concebir. Por lo general, la mayor parte de las embarazadas descubren que lo están al poco tiempo de la primera falta. No obstante, lo ideal sería planificar el embarazo. Por ello, es aconsejable consultar con el ginecólogo para someterte a un chequeo médico. El especialista, a su vez, te irá a recomendar tomar ácido fólico, un suplemento fundamental para prevenir enfermedades serias en el desarrollo del feto.
Otro punto importante es cuidar la alimentación. Estar muy delgada o tener sobrepeso son dos de las cosas que pueden influir negativamente las posibilidades de lograr un embarazo. De este modo, es importante evitar el exceso de comidas ricas en grasa y optar por alimentos frescos y mucha fruta.
Al mismo tiempo, es preciso subrayar la necesidad de evitar el consumo de alcohol y tabaco, antes y durante la gestación, ya que dificultan la concepción. Esto no quiere decir que no puedas quedar embarazada, pero sí es importante saber que el consumo de dichas sustancias estimula la aparición de diversos trastornos, tanto para la salud de la mujer como la del futuro bebé.

Cómo combatir la sudamina en los bebés durante los meses de calor

Los bebés que nacen durante el verano suelen presentar granitos en su piel a causa de las elevadas temperaturas. Ese sarpullido o sudamina consiste en una alteración de la piel, que no reviste importancia, más allá de que es un poco antiestética. Es de vital importancia no confundirla con otras afecciones infantiles en las que puede aparecer un sarpullido en la piel, razón por la cual es conveniente realizar una consulta con el pediatra.
A pesar que es muy común durante los primeros meses de vida de los bebés, la sudamina puede aparecer también en niños mayores cuando la temperatura sube por encima de los 30 ºC. Por lo general, los granitos aparecen de manera dispersa o, bien, juntos formando ronchas de tono rojizo, pudiendo producir picazón producto de que la piel se encuentra inflamada.
Los granitos que produce la sudamina aparecen cuando la piel del pequeño impide salir el sudor y éste resulta retenido en las capas de la dermis, dando lugar a pequeños granitos rojos. Cuando se trata de una sudamina leve, las ampollas diminutas se rompen con facilidad y se forman costras. Pero si el calor persiste, los granitos rojos pueden producir picazón y reaparecer comúnmente en diferentes partes del cuerpo, siendo las más habituales: la frente, las mejillas, los párpados y la nariz. Aunque también suelen brotar en los brazos, la nuca y en el tronco superior, además de la zona del pañal y en los muslos.
La que se recomienda para mantener al bebé libre de sudamina es evitar que sude, algo que en el verano se torna muy difícil con la subida de las temperaturas. De modo que para ayudar a mantener fresco al bebé se aconseja cambiarle el pañal con frecuencia,  para que no acumule calor y humedad, bañarlo solamente con agua, sin usar gel o jabones que puedan provocar la irritación de su piel, secarlo con suaves toques,  para absorber la humedad de su piel, y vestirlo con ropa liviana, evitando  ponerle ropa ajustada.
Además, resulta recomendable conservar el ambiente fresco, evitar la exposición directa y prolongada al sol, y tocar la nuca del bebé para saber si está acalorado.
Cuando aparecen los granitos de la sudamina, aparte de aplicar todas las medidas preventivas para evitar que se agraven, el pediatra puede recomendar una crema con cortisona, en los casos más severos.