Algunas madres, tras el parto, sufren de mastitis. Pero ¿qué es la mastitis?, se preguntarán ustedes. Consiste en una infección de uno o ambos senos, la cual es provocada por la penetración de los gérmenes de la piel en los conductos glandulares de la mama. Dicho problema es bastante frecuente entre las mujeres en período de lactancia, debido a que durante el mismo se forman grietas en el pezón que favorecen el ingreso de los mismos.
Sin embargo, la mastitis puede prevenirse ¿De qué manera? Aunque no lo crean, dando el pecho al bebé con mayor frecuencia. No hay que dejar pasar mucho tiempo entre una toma y otra, y si observas que está muy congestionado, es recomendable ayudarse con un sacaleches.
Al mismo tiempo, es preciso cuidar mucho la higiene. Con una ducha diaria alcanza, pero también puedes lavar con agua tibia el pezón en el momento previo y posterior de cada toma, evitando el uso de jabón u otros productos irritantes. Luego de cada lavado, coloca una gasa esterilizada, y en caso que notes que hay segregación de leche, cámbialo cuantas veces lo creas necesario, ya que los senos tienen que permanecer secos.
Por último, es conveniente utilizar un sostén que sea un poco holgado, debiendo cambiártelo cada vez que salga leche. En caso que presentes síntomas intensos como escalofríos, fiebre o mucho dolor, visita a tu médico para que te recete un medicamento. Tengan en cuenta que la mastitis puede producirse en un solo seno, por lo que es posible continuar dando de lactar al bebé con el otro, y en caso que los dos senos se vean afectados, lo mejor es vaciarlos con el sacaleches.
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Modo de extracción y conservación de la leche materna
La leche materna es el mejor alimento para cualquier bebé. Por eso si tienes abundante leche, una buena opción es extraerte la misma con un sacaleches, ya sea manual o eléctrico, y luego congelarla para su conservación.
Aunque parezca sencillo, se deben tomar ciertas precauciones al momento de proceder a la extracción de leche. En este sentido, resulta fundamental evitar que la leche se contamine para poder utilizarla con total seguridad.
Antes de comenzar la extracción, es preciso lavarse correctamente las manos y las uñas con abundante agua y jabón. Para el secado de las mismas, solo basta con una toalla limpia o una servilleta de papel. Asimismo, la ducha diaria alcanza para mantener el pecho limpio, sin que haya necesidad de lavarlo antes de proceder a la extracción.
En primer lugar, resulta aconsejable masajear el pecho antes de la extracción, ya sea con el sacaleches como manualmente, facilitando de ese modo la salida de la leche. La leche debe guardarse en un envase de uso alimentario, como por ejemplo una bolsa diseñada especialmente para conservar leche materna, un bote de cristal o de plástico duro. Es conveniente que el envase, al que previamente debe lavarse con agua y jabón, sea pequeño, con boca ancha, fácil de limpiar y cerrar. Recordar siempre que antes de almacenarla, es necesario poner la fecha de extracción en el bote para poder calcular su caducidad.
Otra de las cuestiones a tener en cuenta es el modo de conservación. La leche fresca, tiene que mantenerse a temperatura ambiente durante 8 horas. En el frigorífico, puede durar hasta 2 días. En caso que no vaya a ser consumida en ese lapso de tiempo, conviene congelarla de inmediato, pudiendo durar así varias semanas, incluso meses. Una vez descongelada, debe guardarse en el frigorífico y ser consumida en un plazo de 24 horas, no pudiendo volver a congelarse.
En fin, tales pautas les servirán sobre todo a aquellas madres que, por ejemplo, deben retornar a sus trabajos luego de culminar su licencia por maternidad o para aquellas que deseen realizar donaciones a un banco de leche con el propósito de alimentar a los bebés enfermos o prematuros que lo necesiten.
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Sacaleches, como elegir el más adecuado
Al momento de tener que elegir un buen sacaleches la mamá que vaya a adquirirlo debe evaluar cual es el que mejor se ajusta a sus necesidades personales, recordemos que no por ser el más caro debe ser el mejor y que cualquiera sea la elección la leche materna es el mejor alimento que un bebé puede recibir los primeros meses de vida para su correcto desarrollo y crecimiento.
La lactancia materna se recomienda por lo menos hasta los 6 meses de vida de un bebé, por lo que adquirir un sacaleches en el caso de que la misma sea abundante, es una muy buena opción para amamantarlo cuando necesitamos retomar nuestras tareas cotidianas y laborales. El mismo nos permite sacar la leche de nuestros senos, almacenarla y brindársela al bebé sin que pierda sus características nutricionales.
Para elegir el mejor hay que tener presente el uso que vamos a darle, y de allí evaluar el costo-beneficio para hacer una correcta elección. Recordemos, si solamente lo utilizaremos para retirarnos la leche cuando los senos estén muy llenos, si vamos a utilizarlo para almacenar leche y brindársela al bebé en nuestra ausencia o vamos a usar todas las funciones que un buen sacaleches nos permite obtener. Los precios de los mismos son muy variados de acuerdo a las funciones que el mismo posea, por eso es importante tener bien presente para que vamos a utilizarlo, en caso de que solamente lo necesitemos para vaciar la leche sobrante en los senos, lo mejor es adquirir uno simple y de bajo coste.
Lactancia materna, los sacaleches
A menudo muchas madres se encuentran con que sus pechos poseen mucha leche, y esto significa un gran beneficio, no solo para ellas, sino también para el bebé que recibirá el mejor alimento que existe la leche materna.
En esos casos donde la leche materna es abundante, los sacaleches son una excelente opción para recolectar el alimento y podérselo brindar al bebé, cada vez que lo necesite, si nosotras estamos ausentes y no podemos prenderlo al pecho. En el mercado industrial existen dos tipos de sacaleches, los manuales y los eléctricos, ambos con los mismos beneficios pero cada uno de ellos con funciones propias que se adaptan a las diferentes necesidades de cada madre.
La elección de los mismos dependerá mucho de cada mamá y del tiempo que cuente para alimentarlo de su propio pecho, en el caso de no poder realizar esto último gracias a los sacaleches no existe ningún impedimento para que el bebé reciba la leche de su madre.
Los sacaleches manuales, como indica su nombre característico, se accionan manualmente permitiendo a la madre controlar la cantidad y fuerza de succión del mismo además de permitir una pausa para que la madre se recupere y sus senos se vuelvan a llenar para poder volver a utilizarlo.
Por su parte los sacaleches eléctricos permiten una mayor velocidad para vaciar los senos maternos, los mismos vienen con un motor que se ocupa de succionar la leche materna para luego almacenarla, son muy prácticos a pesar de que su coste sea más elevado y vienen con parámetros establecidos para poder elegir la velocidad y el tiempo de succión de los senos que cada madre necesita.
Lactancia, ¿Qué es la mastitis?
Muchas mamás cuando se encuentran dando el pecho sienten ciertas molestias, sobre todo al principio, o luego de dar el pecho cercano a la hora que el niño debe volver a alimentarse. Esto es absolutamente natural, ya que los senos se vacían luego de alimentar al pequeño y vuelven a llenarse rápidamente antes de que se cumpla el tiempo de volver a dárselo.
La mastitis es una infección que puede aparecer en uno o en ambos senos y generalmente su causa son gérmenes que ingresan mediante la piel a través de los conductos de la mama. Es muy común que cuando una esta amamantando aparezca éste tipo de infección, que además provoca grietas y lastimaduras en el pezón incrementando aún la posibilidad de que la infección empeore.
La forma de prevenir la mastitis más allá de que pueda parecer raro es prendiendo al bebé más seguido y sin interrumpir la lactancia, cuando una no deja pasar mucho tiempo entre toma y toma, sobre todo en los primeros días esto es de gran ayuda. En el caso de aquellas mujeres que tienen leche materna en abundancia, se recomienda el uso del sacaleches, para evitar la congestión en los senos y de esa forma mantenerlos aliviados del dolor o las molestias que esto pueda causar.
La higiene es imprescindible en estos casos. Los pezones, antes de amamantar deben lavarse con un poco de agua tibia evitando el uso de productos que resulten irritantes. Luego de dar el pecho debes higienizar nuevamente el seno y tratar de que el mismo siempre permanezca seco. En el caso de utilizar protectores mamarios, lo mejor es que cuando el mismo se encuentre húmedo, lo cambies justamente para evitar que al estar la piel húmeda, pueda lastimarse.
La mastitis, muchas veces puede provocar, dolor, tensión en los senos, y fiebre, en esos casos sobre todo si la fiebre es muy alta no dejes de consultar con tu médico de confianza. Si es solamente uno de los senos el que se encuentra afectado puedes amamantar a tu pequeño bebé, con el otro hasta que éste se cure, y retirar la leche del pecho afectado con el sacaleches.
Almacenamiento de leche
La madre puede, si se ve obligada, extraer la leche para poder darle de comer al pequeño en otro momento del día. Extraer leche, de manera manual o con la ayuda del sacaleches. De todas maneras, hay que advertir que se necesita un poco de práctica para hacerlo; pero, cada vez son más las mujeres que deciden realizar esto, para dar a sus hijos la leche materna, si no van a poder estar con él, en el momento de la toma. La clave para que esto sea efectivo, está en el hecho de que debemos conseguir que el efecto de la succión sea el doble, para conseguir que la leche salga. Para conseguir esto se aconseja hacerlo en un lugar íntimo, tranquilo y donde podamos pensar en el pequeño. Debemos elegir un lugar donde no haya muchas interrupciones, donde podamos estar tranquilas.
Tenemos distintos métodos en el mercado de extracción de leche, que van a ir dependiendo de las causas de la separación y de la edad del bebé. También, debemos tener mucho cuidado con el tema de la limpieza, como el buen lavado de las manos y de todos los utensilios que vamos a usar, tanto en la extracción, en la recolección y en el almacenamiento de nuestra leche.
Dicha extracción se puede hacer de manera manual, que es como se hacía antiguamente, en los pueblos primitivos -y, no tan primitivos-. Esta es la mejor opción si la separación va a ser por un período corto de tiempo. Si va a ser por un período de tiempo largo, entonces, lo mejor es un sacaleches eléctrico.
Dentro, también, de los sacaleches, los hay de tipo manual, que se basan en imitar la acción de una jeringa, o que se pueden usar de una sola manera. Entre los eléctricos, nos encontramos con algunos que nos ofrecen la posibilidad de extraer de un pecho, o de los dos a la vez -lo que hace que nos ahorremos la mitad del tiempo-.
Las claves de la lactancia materna (II)
Un hecho curioso es que, cuando más mame el bebé, más leche va a crear la madre. Pero, debemos tener en cuenta que hay un equilibrio natural, que no debemos forzar. Es el bebé el que marca las pautas, el que va a mamar, según lo necesite o no. No tenemos por que tener la sensación de tener el pecho lleno de leche. La naturaleza ha hecho que la leche se produzca, de manera principal, durante el momento de la toma, gracias a que la succión que realiza el bebé lo estimula. Debemos evitar, de la mayor manera posible, los biberones “de ayuda” o el suero glucosador.
Este tipo de productos llevan al bebé y hacen que los bebés pasen de hacer la acción de mamar. Este hace que el bebé no quiera succionar y, al hacerlo menos, provoca que las glándulas mamarias de la madre produzcan menos leche. También, debemos evitar el chupete. Por lo menos, las primeras semanas de su vida, hasta que el estado de lactancia esté muy bien establecido. Debemos tener en cuenta que los pequeños deben aprender a mamar el pecho y, claro, las tetinas de manera artificial, como pueden ser los chupetes o el biberón hacen más difícil el aprendizaje. Los bebes no sólo succionan por culpa del hecho, también lo hacen por que necesitan succionar o por que quieren consuelo, o sea, sólo quieran un poco de cariño, de amor de su madre. Si queremos calmar a nuestro pequeño, lo mejor es darle un poco de pecho. También, tenemos que tener tiempo para cuidarnos, mientras nuestro pequeño está durmiendo. Y, son tenemos alguna duda, lo mejor es consultar a las enfermeras, en el hospital; o, en las mujeres de la familia que ya han tenido algún hijo.
Almacenamiento de leche
La madre puede, si se ve obligada, extraer la leche para poder darle de comer al pequeño, en otro momento del día. Extraer leche, de manera manual o con la ayuda del sacaleches. De todas maneras, hay que advertir que se necesita un poco de práctica para hacerlo; pero, cada vez son más las mujeres que deciden realizar esto, para dar a sus hijos la leche materna, si no van a poder estar con él, en el momento de la toma. La clave para que esto sea efectivo, está en el hecho de que debemos conseguir que el efecto de la succión sea el doble, para conseguir que la leche salga. Para conseguir esto se aconseja hacerlo en un lugar íntimo, tranquilo y donde podamos pensar en el pequeño.
Debemos elegir un lugar donde no haya muchas interrupciones, donde podamos estar tranquilas. Tenemos distintos métodos en el mercado de extracción de leche, que van a ir dependiendo de las causas de la separación y de la edad del bebé. También, debemos tener mucho cuidado con el tema de la limpieza, como el buen lavado de las manos y de todos los utensilios que vamos a usar, tanto en la extracción, en la recolección y en el almacenamiento de nuestra leche. Dicha extracción se puede hacer de manera manual, que es como se hacía antiguamente, en los pueblos primitivos -y, no tan primitivos-. Esta es la mejor opción si la separación va a ser por un período corto de tiempo. Si va a ser por un período de tiempo largo, entonces, lo mejor es un sacaleches eléctrico.
Dentro, también, de los sacaleches, los hay de tipo manual, que se basan en imitar la acción de una jeringa, o que se pueden usar de una sola manera. Entre los eléctricos, nos encontramos con algunos que nos ofrecen la posibilidad de extraer de un pecho, o de los dos a la vez -lo que hace que nos ahorremos la mitad del tiempo-.