Cumpleaños feliz de Carla Moyá Cerezuela

Cumpleaños feliz de Carla Moyá Cerezuela

El mes de agosto es un mes de cumpleaños infantiles en la prensa del corazón. Y es que, Daniella Bustamante cumple tres años. Sin embargo, otra pareja muy simpática con los medios de comunicación también celebra con ilusión el primer año de vida de su niña Carla. Os estamos hablando, como no podía ser  de otra forma, del tenista Carlos Moyá y de la actriz Carolina Cerezuela que se casaron este verano. Es decir, que este 2011 siempre va a quedar en el recuerdo como uno de los más especiales de su vida para ellos.

Hace un año que ambos ampliaron la familia y tuvieron una niña en la que se han volcado al cien por  cien. Es decir, no quieren perderse ni un minuto de la infancia de su hija. Y es que la verdad es que ambos, más allá de ser famosos tienen una vida de lo más normal y familiar.

El tenista Carlos Moyá además, pasó mucho tiempo de su vida viajando por motivos profesionales. Esta es una de las razones por las que ahora mismo, disfruta tanto de poder estar con aquellas personas a las que quiere sin tener que alejarse para ir a torneos. Los años han pasado volado y la verdad, ya queda muy lejos la historia de amor que vivió en el pasado con la guapa Patricia Conde.

Con motivo de este primer cumpleaños de Carla, la pareja ha organizado una fiesta en la que seguro que la pequeña recibe muchos regalos. Aunque lo más importante es el cariño de la familia y poder disfrutar del verano y del presente en familia.

Carolina Cerezuela por su parte ahora selecciona mucho más sus trabajos y sus proyectos porque quiere centrarse en la educación de su hija y también, quiere fortalecer el vínculo con su niña. Este mes de agosto, dos niñas muy queridas han soplado las velas de su tarta de cumpleaños: Carla Moyá y Daniella Bustamante. Ambas tienen algo en común más allá de la fecha del calendario y es que, son hijas de dos actrices conocidas que han triunfado en la tele. Ambas, también, muy guapas.

Imagen: Ropa Premamá

Daniella Bustamante Echevarría sopla las velas de su tarta de cumpleaños

Daniella Bustamante Echevarría sopla las velas de su tarta de cumpleaños

La verdad es que no soy una gran seguidora de la carrera de actriz de Paula Echevarría, sin embargo, me parece una artista muy simpática y también cercana. Además, creo que tiene el gran mérito de tener su propio blog de moda en Elle donde cada día, incluso en vacaciones, ha actualizado sus propios estilismos y ha mostrado que es toda una trabajadora nata. Por otro lado, es valiente al tener su propio blog por la sencilla razón de que, como puede comprobar cualquier lector que observa los comentarios, se arriesga tanto al elogio como a la crítica. Y es que, nunca llueve a gusto de todos.

Pues bien, Paula Echevarría también comparte con su público ciertos momentos de su vida privada y de su corazón. Así lo hizo ayer cuando felicitó a su hija Daniella con estas palabras que seguro que logran emocionar a todas aquellas personas que también son madres:

«Me tenéis que permitir que este post esté dedicado a mi pequeña Daniella que hoy cumple 3 añitos… Te pasas la vida escuchando cosas sobre madres e hijos; que son lo que más se quiere del mundo, que es el amor más incondicional, que tu vida nunca vuelve a ser la que era antes… ¡y todo es cierto!… Pero cuando los tienes te das cuenta de que todo lo que te pudieran contar se queda corto al lado de lo que se siente! ¡Me duele el pecho de tanto quererla! ¡Y solo pienso cómo pude vivir sin ella todos estos años! Hace que mi vida sea mejor en todos los sentidos y hoy le digo desde aquí: ¡¡¡Daniella, te quiero mas que a mi vida!!!

Daniella Bustamante Echevarría cumple tres años y lo ha hecho con la ilusión de una niña pequeña que tiene la suerte de ser muy querida por sus padres y de crecer en una familia en la que hay mucho amor. Sin duda, David y Paula forman una de las parejas más estables del panorama social actual. Así que también aprovechamos la ocasión para desear que la niña y la familia haya disfrutado de una fecha tan especial.

Imagen: Tras la pista de Paula Echevarría

Jessica Alba tiene a su segunda hija

Jessica Alba tiene a su segunda hija

Jessica Alba una de las actrices más atractivas del panorama internacional se ha sumado a la lista de mujeres que han ampliado la familia en Hollywood. Sin duda, no podemos perder de vista a la guapa Penélope Cruz o a la ganadora de un Oscar, Natalie Portman. Pues bien, Jessica Alba a sus 30 años de edad se siente mejor que nunca. Acaba de ampliar la familia ya que ha tenido una hija fruto de su relación con el atractivo Cash Warren. Ambos forman una de las parejas más estables del panorama internacional.

Pero además, Honor Marie, la hija mayor de la pareja también está encantada con la llegada de esta nueva hermanita con la que podrá jugar y pasarlo realmente bien. A lo mejor, como es natural, tendrá los celos propios hacia el hermano menor que se convierte en el centro de atención y de mimos de la familia. Jessica Alba dio a luz el sábado pasado y todo fue a la perfección, es decir, el parto se desarrolló con normalidad y tanto la madre como la hija se encuentran en perfecto esta de salud. El bebé ha pesado algo más de tres kilos.

Además, hoy día, los personajes famosos se comunican con su público de forma habitual a través de las redes sociales. Por ejemplo, hace sólo unas semanas cuando Alejandro Sanz fue padre de Dylan, compartió la noticia con el mundo entero a través de twitter. Pues bien, la guapa Jessica Alba ha hecho algo semejante pero en su caso, ha preferido dar la alegría a través de facebook. Aquí tienes el testimonio de una madre ilusionada hasta el extremo: «Haven Garner Warren nació el sábado pesando 3,17 kilogramos y mide 48 centímetros».

Sin duda, Jessica Alba es el prototipo de una mujer moderna que no sólo ha formado un hogar y se darrolla como madre sino que también, triunfa en el cine y tiene aspiraciones profesionales en la gran pantalla. De hecho, podrás disfrutar de su presencia gracias a la película Spy Kids: All the Time in the World». Jessica Alba ha sido madre de nuevo y esta noticia ha alegrado mucho a todas las fans de la artista.

Imagen: Ine.es

Pasar de la cuna a la cama

Todos los padres solemos preguntarnos acerca de cuál es el momento indicado para pasar a nuestros hijos de la cuna a la cama. Algo que así dicho, parece ser sencillo, pero que no lo es tanto como aparenta, ya que es un paso trascendental tanto en la vida del bebé como de toda la familia.
La primera duda que aparece es cuándo realizar el cambio; ya que al comienzo los bebés duermen en cunas pequeñas porque ofrecen un lugar más pequeño, al resguardo de sonidos, e incluso algunas brindan la posibilidad de mecerse para ayudar al niño a conciliar el sueño.
La respuesta es simple, todo depende de cada bebé en particular. Se debe realizar el cambio cuando la cuna deja de ser un espacio seguro, para evitar caídas accidentales del bebé. En fin, todo esto va a depender sobretodo de la capacidad motora del bebé, de su carácter (si es muy inquieto o más pasivo) y de su tamaño.
Al momento de cambiar, suelen considerarse varios aspectos, siendo importante el estético aunque de ninguna manera es determinante. Es preciso valorar, además, la estabilidad de la cama elegida, la seguridad de la misma, en cuanto a barrotes, superficies limadas que no lastimen al bebé, entre otras cosas, y su funcionalidad, es decir, si aparte de cama puede ser cajonera, y cuánto puede durarnos.
En la web es posible hallar diversos catálogos que te serán de ayuda para encontrar la mejor cama para tu bebé.

Paco de Lucía, padrino de Dylan, el hijo de Alejandro Sanz

Alejandro Sanz fue el padrino de Ella, la hija de Elena Tablada y de su gran amigo, David Bisbal. Sin embargo, a pesar de que Alejandro también fue padre hace sólo unos meses, la realidad es que no ha nombrado padrino al artista de Operación Triunfo, aunque eso sí, su elección ha quedado dentro del mundo de la música. El padrino de Dylan será nada más y nada menos que Paco de Lucía que tiene una excelente relación con el autor de Corazón Partío.

Alejandro Sanz ha comentado con mucho humor que a pesar de que el niño no nació en España y que además, tiene un nombre extranjero, sin embargo, sí tendrá un padrino de raíces españolas, que le dará la paga y ejercerá como padrino de una forma muy especial. Se trata de una tradición habitual dentro de la religión católica. Al final, siempre suele costar elegir a los padrinos del niño porque en el entorno pueden existir personas muy queridas y está claro que sólo pueden ser dos los elegidos.

En este caso, Paco de Lucía va a tener el gran honor de ejercer como padrino de este niño que seguro que teniendo en cuenta dónde ha nacido, tendrá una gran afición musical. No es la primera vez en la que Alejandro Sanz ha sido papá sin embargo, ahora mismo en su madurez está disfrutando mucho de este momento tan especial.

Una situación que contrasta claramente con el sabor tan amargo de la ruptura de su gran amigo David Bisbal que sin duda, no atraviesa el mejor momento de su vida, todo lo contrario. Y es que, no es fácil romper con la pareja justo en el momento en que se ha tenido a una hija en común y que todavía es muy pequeña.

Por supuesto, Alejandro Sanz apoya al cantante en todo lo que puede porque él también sabe lo que es hacer frente al dolor de una ruptura y de un desamor que implica mucho tiempo y paciencia poder superar. Alejandro Sanz y David Bisbal la cara y la cruz de la felicidad dentro del mundo de la música.

Foto vía: Wikipedia

Etapas de sueño de los recién nacidos

Los recién nacidos suelen despertarse cada un lapso de dos o tres horas y no diferencian el día de la noche, algo que a los padres nos agota bastante. A pesar de que parece que el sueño del bebé no responde ninguna regla, en realidad hay etapas que son muy fáciles de reconocer.
Los patrones de sueño de todo recién nacido pueden sintetizarse en ocho horas de sueño en el día y ocho durante la noche, con interrupciones cada dos o tres horas aproximadamente. De todas maneras, no se puede generalizar sobre el tema, ya que cada bebé posee sus propios tiempos de sueño y vigilia. Es de importancia que los padres consulten al pediatra si notan algún cambio en ellos, como por ejemplo que el bebé no se despierte cada dos o tres horas para comer, sino que duerma unas cinco horas de continuado.
El sueño del bebé, al igual que el de los adultos, pasa por diversas etapas: el sueño REM, una clase de sueño ligero y un período en el cual se sueña. Los bebés permanecen casi la mitad del  tiempo de sueño en la fase REM y conforme vayan creciendo esta etapa se va acortando. En tanto que el sueño NO REM, se reconoce porque los movimientos oculares son lentos y se divide en cuatro subetapas: la somnolencia, el sueño liviano, el sueño profundo y el sueño muy profundo.
Al dormir, el bebé atraviesa cada una de esas etapas y en el proceso de despertarse las recorre de manera inversa: del sueño muy profundo al profundo, después al liviano y al sueño REM. En caso que el bebé se llegara a despertar antes de haber dormido lo suficiente, es probable que le sea difícil conciliar el sueño nuevamente.
A diferencia de los adultos, los bebés no pueden darse cuenta de que tienen sueño y necesitan dormir, de manera que el sueño se percibe como una molestia que se evidencia cuando se frota los ojos y bosteza. Por lo que lo más conveniente es tomarlo en brazos y alejarlo de los estímulos para ayudar a tranquilizarse y entrar a la etapa de somnolencia. Así, al colocarlo en su cuna, se dormirá solo.
Una buena opción es acostumbrar al bebé a tomar el pecho o la última mamadera antes de dormir, estableciendo de ese modo una rutina útil que, de a poco, le ayuda al bebé a ir reconociendo cuando es la hora de dormir.
El bebé no tiene que acostumbrarse a dormirse en brazos, sino que hay que colocarlo en su cuna boca arriba, sobre  un colchón firme, sin cojines, peluches o mantas que puedan resultar peligrosos.

Dermatitis del pañal

La dermatitis o sarpullido del pañal es uno de los problemas de la piel que más se presentan en los bebés, durante su primer año de vida. Básicamente, consiste en una inflamación de la piel en la zona que permanece en contacto con el pañal.
Una de las principales causas de la dermatitis es, sin dudas, el exceso de humedad y fricción, en lo que intervienen el contacto prolongado con la orina y las heces, la temperatura de la zona, las enzimas fecales, bacterias y hongos, entre otras cosas. Cuando las heces y la orina se encuentran presentes de manera simultánea, la enzima llamada ureasa fecal produce la separación del amoníaco que integra la urea, generando un aumento en el pH de la piel,  irritando de esa manera la piel.
Según estudios realizados, se comprobó que los bebés alimentados a pecho poseían un pH fecal menor y, en consecuencia, las enzimas como la lipasa y proteasa se hallaban disminuidas, por lo que era menor la incidencia de la dermatitis del pañal.
Es muy importante consultar inmediatamente con el pediatra o el dermatólogo infantil para diagnosticar las diversas causas de la afección, ya que la distribución y clase de lesiones en la piel sirven para definir un adecuado diagnóstico y tratamiento.
El empleo de pañales de celulosa descartables ha colaborado bastante en reducir este tipo de inflamaciones. El pañal usado tiene que ser lo suficientemente grande y poseer un diseño que permita reducir el roce al mínimo. El pañal debe ser cambiado cuando se encuentra mojado o sucio y para la higiene diaria lo mejor es limpiar con aceite común u óleo calcáreo, prescindiendo del uso de polvos.
En el caso de que tu pequeño sufra de dermatitis, es recomendable utilizar agua y jabón en el lavado cuando se lo cambia, dejando secar la parte afectada al aire libre por unos minutos, para luego aplicar un preparado a base de pasta lasar.  En caso de que haya una sobreinfección con un hongo, lo indicado es el uso de una crema con derivados imidazólicos tópicos, y si el niño presenta además un eccema atópico de base se deberán suministrar antihistamínicos por boca. El tratamiento dura entre ocho y diez días, tiempo necesario para que la piel se regenere.

Cómo aliviar los cólicos en el lactante

Últimamente, se ha generalizado la teoría del cólico, el cual es tradicionalmente conocido en pediatría como cólico vespertino o cólico de los tres meses, que se manifiesta como llanto inexplicable.
Los cólicos por lo general son asociados con las molestias vinculadas con el aparato digestivo, todavía inmaduro, que ocasionan dolores de panza, retorcijones o gases.
Si bien es poco probable evitar los cólicos, es posible aliviar el dolor del bebé mediante algunas técnicas.
Es importante observar la succión del bebé, corrigiéndola en caso de que trague mucho aire al amamantar, ayudando de ese modo a que tenga menos gases.
También, es bueno hacer movimientos suaves con sus piernitas, imitando el movimiento de pedaleo.
Sostenerlo boca abajo, sobre el antebrazo,  masajear su pancita con movimientos circulares, darle un baño de agua tibia o mecerlo y arrullarlo, son otras de las cosas que suelen calmar al pequeño.
Generalmente, los cólicos tienden a desaparecer cerca de los 3 meses, momento en que madura el intestino.
Una de las creencias más extendidas es aquella que sienta por hecho la relación entre los cólicos del lactante y los alimentos que ingiere la mamá. Sin embargo, los cólicos son normales en todo lactante y, hasta tanto no madure su intestino, es poco lo que podemos evitar.
Es bueno aclarar que los alimentos que ingiere la madre no pasan de manera directa al bebé, pero existen algunos alimentos, como el ajo o los picantes, que por su fuerte sabor pueden alterar de algún modo el gusto de la leche, generando en el bebé un rechazo momentáneo de la misma.
Algunas mamás, han notado que cuando ellas comen alimentos que les ocasionan gases, sus bebés se ponen más molestos y suelen tener más cólicos de lo habitual. Esto quizá se trate de algo más psicológico que fisiológico en sí.

La angustia del octavo mes

Por lo general, cuando el bebé cumple los 8 meses, y en algunos casos después del quinto mes de vida, ocurre que sin motivo alguno, el bebé empieza a llorar de manera desconsolada mientras está con algún familiar, a lo largo de la noche o mientras juega con otros integrantes de la familia.
Nada tiene que ver con que le estén saliendo los dientes, ni con que le haya dado un ataque de mimos, sino que está transitando por el primer desprendimiento de su vida, y eso le genera angustia, tanto a él como a sus padres.
Suele pasar que lloran mucho en el día y se despiertan más veces de lo habitual durante la noche, desean estar en brazos más de lo común y no quieren estar más que con la propia madre.
Ahora, bien, ¿a qué se debe esto? La principal causa de dicha angustia es que al empezar a independizarse, el bebé se siente separado de su mamá, a quien hasta entonces vio como una parte indivisible de sí. El pequeño comienza a aprender nuevas formas de movilización y, a la vez, coincide con la independencia alimenticia debido a que se complementa el hecho de tomar el pecho con comida sólida.
Tales cambios son naturales, aunque resultan conflictivos al pequeño, porque este proceso de independencia por el que transita lo hace sentir de alguna manera desprotegido. El temor lo lleva a que desee estar más apegado a su mamá y, en ocasiones, hasta llega a rechazar a otros miembros de la familia o amigos. Puede verse bastante alterado cuando lo quieren tomar en brazos o le irrita absolutamente todo, ocultando su cabecita en el regazo de su mamá.
Esta conducta si bien puede asustar a más de una mamá, no supone que el bebé haya tenido un retroceso, ya que se trata de una etapa normal en el desarrollo psicológico de todo ser humano.
Llegado este momento, el bebé te necesitará mucho, ya que para él la mamá es la única persona que le puede brindar seguridad y confianza, por eso es importante tomarlo en tus brazos y consolarlo cada vez que el pequeño lo necesite. Al mismo tiempo, puede  desarrollar cierto apego por algún objeto, como ser un peluche, una mantita, el chupete o chuparse el dedo, algo que le dará seguridad cuando no esté en tus brazos.
Este estado anímico, dependiendo de cada niño, puede durar varios días, semanas o incluso meses, por lo que se debe tener mucha paciencia.
Es importante tener en cuenta que el bebé está viviendo muchos cambios juntos, por lo que no resulta conveniente sumarle otro más. De modo que, durante ese período, no debes planear un viaje, una mudanza o un nuevo trabajo.
Ármate de paciencia, pero no debes preocuparte ya que, en general, es un proceso que dura pocas semanas. Sin embargo, si la angustia persiste, lo notas deprimido o se niega a comer consulta con el médico de cabecera.

Enseñando al bebé a dormir

La llegada de un bebé, sin dudas, marca un rotundo cambio en la vida de toda pareja, en especial a la hora de dormir. Pensar en dormir toda la noche como antes parece un sueño realmente lejano. De todos modos, hay algunas técnicas que pueden ponerse en práctica para enseñar al bebé a dormir. No olvidemos que a dormir se aprende, al igual que a comer o a caminar.
Una de las cuestiones fundamentales es la vestimenta. Asegúrate que el bebé posea una vestimenta apropiada para dormir.
También, es importante respetar los horarios de alimentación del pequeño, estableciendo una rutina en sus comidas, sobretodo en aquellos bebés que comienzan a comer sólidos. Además, prueba  con darle su última comida antes de las 22 hs, ya que después de este horario los cólicos o algunos trastornos digestivos podrían generarle molestias para dormir o, incluso, despertarlo durante la noche.
Otro aspecto esencial reside en enseñarle a diferenciar al bebé, desde bien pequeño, el día de la noche. Luz y ruido a lo largo del día, oscuridad y silencio durante la noche.
Un error muy común que cometemos las madres es acunarlo en brazos para que se duerma. Sólo hay que recostarlo en su cuna y darle unas caricias, cantarle una canción o contarle un cuento. De esa manera, se fijará una rutina que lo ayudará a dormir.
Al mismo tiempo, trata que un juguete que le agrade lo acompañe en la cama. Un juguete especial puede resultar una buena compañía al momento de acostarse, ayudándolo si se despierta por la noche.
Segundo error muy común: si llora, definitivamente no lo lleves a tu cama. Hazle compañía en su habitación, hasta que consiga dormirse de nuevo. En caso que vuelva a llorar, demora cada vez más en ir a su habitación, incrementando los tiempos de a 5 minutos. Así, el bebé no se acostumbrará a que alguien acuda a él de manera inmediata.
Asimismo, es de gran ayuda establecer una rutina para ir a dormir, como si fuera una especie de ceremonia, que se repita cada noche. Puedes contarle un cuento o ponerle un poco de música, a la misma hora todos los días.
Y, lo más importante, respeta y haz respetar estas reglas. No hay que permitir que las personas que lo cuidan cuando no estés quebranten estas reglas. Haz que las respete con firmeza, pero al mismo tiempo con afecto. De esta forma, el bebé aprenderá a conocer cuáles son sus límites.