Síntomas de un embarazo

Síntomas de un embarazo

Síntomas de un embarazo. Un embarazo muestra diferentes síntomas que debes tener en cuenta para poder saber si estás en estado de buena esperanza. Sin duda, formar una familia es el deseo de muchas personas que quieren construir un hogar estable y feliz. ¿Cuáles son los síntomas más frecuentes de un embarazo?

Por una parte, es normal que se produzca más sensación de cansancio del normal en la rutina diaria. Por supuesto, el cansancio también puede estar causado por otros síntomas, por ello, es importante obtener un diagnóstico médico. En algunos casos, las mujeres embarazadas también sienten aversión y rechazo ante algunos olores. En algunas ocasiones, ciertos aromas pueden producir náuseas en el embarazo.

Por supuesto, un síntoma habitual de embarazo es el retraso en la menstruación, especialmente, cuando se trata de una mujer que es regular en sus ciclos. Además, dentro de la lista posible de síntomas, cabe destacar la hinchazón abdominal. Está claro que para salir de dudas sobre un posible embarazo es esencial realizar una prueba de embarazo casera. En caso de que el resultado sea positivo, debes pedir fecha y hora con tu médico.

Además, la temperatura basal también suele estar más elevada durante varios días seguidos. Por tanto, se trata de un aspecto a tener en cuenta. Las madres primerizas tienen más dificultades a la hora de poder conocer e interpretar los signos de embarazo. Sin embargo, aquellas madres que ya han dado a luz en más de una ocasión, tienen un mayor conocimiento de su propio cuerpo y de las sensaciones frecuentes en este periodo de la vida. El momento en que una mujer descubre que está embarazada, suele ser uno de los momentos más especiales de la vida.

Un momento excelente para compartir con gran ilusión con la pareja. De hecho, es bonito poder vivir la noticia en la intimidad durante algunas semanas antes de compartirla con nadie más. Los expertos recomiendan esperar hasta el tercer mes de embarazo para dar la noticia a todos los demás amigos. Una ilusión que se vive de forma muy intensa en la medida en que se comparte con todos.

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Calidad de la alimentación en el embarazo

En el imaginario popular de las embarazadas, ronda la idea de que hay que comer el doble, pues un nuevo ser se aloja en su cuerpo. Pero en verdad, la cantidad no garantiza la calidad de lo que se come, de modo que es preciso observar muy bien qué es lo que se elige para alimentarse, más allá de las cantidades.
Más allá de que el cuerpo necesitará aproximadamente 300 calorías diarias adicionales, sobre todo en el último trimestre de la gestación, estas tienen que proceder de alimentos nutritivos y básicos para el desarrollo del bebé.
Lo que se consume se encuentra íntimamente ligado al desarrollo  pequeño, por lo que es muy importante respetar las indicaciones del médico.
En efecto, tanto el hierro como el calcio son básicos, y deberá consumirse en una dosis prescripta por el profesional médico para que el bebé pueda contar con qué abastecerse y no tomarlos de las reservas de la madre.
Para que el bebé pueda desarrollarse de forma adecuada, son necesarias  proteínas, vitaminas, minerales y carbohidratos.
En el caso de las proteínas, vitales para el crecimiento, las encontramos en alimentos como la carne, pescado, pollo y huevos.
Por su parte, los carbohidratos, que están presentes en pan, cereales, papas y arroz,  resultan esenciales para la energía.
Mientras que el hierro, que es básico para la producción de glóbulos rojos, se encuentra en alimentos tales como las lentejas, las carnes rojas y espinacas. En tanto que las vitaminas se hallan en todas las verduras y frutas.
Por último, es fundamental beber mucha agua y seguir a rajatabla las indicaciones del médico.

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Primeras enfermedades del bebé

Desde el cuarto mes de vida, el bebé puede comenzar a sufrir algunas enfermedades, puesto que los anticuerpos que la mamá le ha traspasado por medio de la placenta se fueron agotando. Aunque los bebés alimentados con leche materna se encuentran protegidos por más tiempo.
No debes dudar en consultar al pediatra en caso que tu bebé pierda peso, ya que ésta es una de las señales más comunes de enfermedad en el bebé.
A partir del cuarto mes, el bebé empieza a entrar en contacto con los objetos: agarrándolos, chupándolos y arrojándolos al piso. De modo que está más expuesto a gérmenes y bacterias y puede empezar a enfermarse.
Si incluso hay más niños en el hogar, lo más seguro es que el bebé contraiga las mismas enfermedades que sus hermanos. En la mayor parte de los casos, el sistema inmunológico del bebé se encuentra preparado para dar respuesta a una gran cantidad de agentes infecciosos, de manera que muchos trastornos desaparecen sin necesidad de ser tratados. Lo bueno es que, de a poco, el pequeño irá construyendo su propio sistema de defensas.
En caso que el bebé concurra a una guardería desde edades tempranas, lo más conveniente es asegurarse de que la cantidad de cuidadores sea la adecuada para que cada bebé reciba la atención necesaria y para que no haya un gran hacinamiento de niños, lo que favorece en muchos casos la proliferación de enfermedades.
De todas formas, no siempre resulta sencillo saber cuándo el bebé está enfermo o qué le duele cuando llora de manera persistente, pero existen determinadas señales que nos pueden indicar que algo está sucediendo, como languidez, palidez, presencia de ojeras, irritabilidad, llanto incesante y falta de apetito. En ese caso, los padres deben consultar con el pediatra.
Ciertas enfermedades, como por ejemplo las pulmonares o las renales, son complicadas de detectar, ya que el único síntoma que se puede observar es la pérdida de peso. El bebé, además puede bajar de peso a causa de trastornos digestivos o alergias alimentarias.

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Beneficios del ácido fólico en el desarrollo del bebé

Un estudio reciente, realizado por el Instituto Noruego de Salud Pública, ha podido determinar los beneficios del ácido fólico luego del parto. De modo que, además de prevenir defectos congénitos, también puede disminuir las probabilidades de que un bebé presente retraso en el aprendizaje del lenguaje.
Para arribar a esta conclusión, los investigadores analizaron los datos de 38.954 niños noruegos, estudiando los casos en los que las madres tomaron ácido fólico y madres que, aparte del ácido fólico, tomaron suplementos vitamínicos durante todo el embarazo. En comparación con las madres que no tomaron los suplementos, los resultados indicaron una importante disminución del riesgo de que el bebé padezca retraso severo en la adquisición del lenguaje. De este modo, los investigadores sostienen que los beneficios se extienden más allá del nacimiento del bebé.
Un 0,9% de los niños, cuyas madres solamente tomaron suplementos vitamínicos, padecieron un retraso significativo del lenguaje, lo mismo sucedía con las madres que no tomaron nada durante el embarazo. En el segmento de mujeres que tan solo tomaron ácido fólico junto con suplementos vitamínicos, el retraso se redujo hasta un 0,4%.
Como es bien sabido, el ácido fólico constituye uno de los suplementos que los médicos especialistas recomiendan a todas las embarazadas en pos de una correcta formación del feto, previniendo así problemas tales como la espina bífida, los defectos congénitos en el corazón, el labio leporino o el paladar hendido, etc.
De acuerdo a los resultados obtenidos, el ácido fólico cumple un papel muy importante tanto en el desarrollo neurológico del bebé como en la comprensión de los procesos biológicos asociados al desarrollo neurológico alterado.
Este estudio sirve para respaldar la necesidad de tomar el suplemento a lo largo de la gestación, aunque algunos expertos señalan que serán necesarios nuevos estudios.

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Sujetadores de lactancia

Los sujetadores de lactancia son una de las prendas que más se recomiendan a las mamás que se encuentran en proceso de lactancia. Tales prendas sirven de ayuda a la hora de darle de lactar al bebé, al tiempo que ayudan en el cuidado de los pechos en la lactancia.
Los sujetadores de lactancia  distinguen por poseer una abertura en la parte anterior de ambas copas, permitiendo dar el pecho sin tener que quitarse el sujetador cada vez que se le vaya a dar una toma al bebé y sin necesidad de soltar al pequeño, puesto que con una sola mano es posible quitarlas y ponerlas con soltura.
Asimismo, estas prendas se adaptan a la perfección a los cambios que sufren los pechos durante el embarazo. No obstante, lo mejor es comprarlos  lo más tarde posible, previo a dar a luz, para comprar el tamaño adecuado.
En cuanto al diseño, las mujeres ya no nos conformamos sólo con lo práctico sino que además debe ser bonito. Con el paso de los años, esta clase de sujetadores ha ido evolucionando. Actualmente, los hay de colores, con dibujos o encajes, con aro o sin él, e inclusive con copas preformadas y algo de relleno.
En referencia a los tejidos con los que están fabricados los sujetadores de lactancia, hay que prestar especial atención a que sean materiales que no causen ninguna alergia ni ningún roce en el pecho, como el algodón y la silicona, ésta última hace que los tirantes sujeten más y mejor, eliminando esa sensación de tirantez.
De este modo, si optas por dar el pecho a tu bebé, el sujetador de lactancia será de gran utilidad, sobre todo durante el primer tiempo.

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¿Qué indica el perímetro cefálico?

Cada vez que llevamos a nuestro bebé al pediatra podemos ver que una de las rutinas es medir el perímetro cefálico, que constituye la medida del contorno de la cabeza en su parte más grande.
Dicha medida, que se toma desde el momento que el bebé nace hasta los 3 años de edad, le sirve al pediatra para controlar el correcto desarrollo del niño. De este modo, se obtiene un récord de medidas, que dependen del sexo y edad del pequeño, que formarán una curva que servirá para precisar si las mismas se hallan dentro de los parámetros normales.
En caso de que la curva de crecimiento del perímetro cefálico tienda a estar fuera de los parámetros normales, esto puede ser un indicador de algún problema. Por consiguiente, si el perímetro cefálico es mayor a lo normal, puede ser síntoma de meningitis, sangrado interno de la cabeza, hidrocefalia,  tumores cerebrales, macrocrania, enfermedad de Canavan,  Síndrome de Morquio o Síndrome de Hurler.
No obstante ello, es bueno saber que un solo síntoma no hace una enfermedad, de modo que si su hijo posee cabeza grande, incluso superando los límites normales pero su desarrollo en general es normal y si posee predisposición familiar a tener cabeza grande, podría tratarse de Macrocefalia familiar benigna. El diagnóstico, debe ser evaluado en todos los casos por el médico.
Por otro lado, en caso que un perímetro cefálico sea menor, esto puede estar indicando: microcefalia, mal desarrollo del cerebro, desnutrición y fusión temprana de los huesos del cráneo.

Bebés que nacen con dientes

Aunque suele ser raro, existen bebés que nacen con uno o más dientes, o que durante sus primeras semanas de vida les brota uno o más dientes; los cuales no son otros que los dientes de leche que aparecieron antes de lo previsto. Si bien dicha situación no se considera anormal, es posible que genere algunos contratiempos.
En determinados casos, el profesional médico llega a solicitar radiografías para constatar el estado de la cavidad bucal y efectuar una evaluación integral, aunque por lo general es suficiente con un examen superficial ya que los dientes se encuentran expuestos y a simple vista. Lo esencial es verificar que los dientes se hallen firmes así como los tejidos sanos, y que su presencia no dificulte la alimentación del bebé.
Otro contratiempo ante este tipo de situaciones es que los dientes del bebé pueden estar flojos. De ser así,  necesitan ser extraídos para impedir que el bebé se los pueda tragar de manera accidental.
Dicho esto, si los dientes están firmes, no hay necesidad de extraerlos para garantizar que no se amontonen los dientes permanentes a la hora de erupcionar.

Dolor al amamantar

Cuando amamantamos a nuestro bebé, es muy posible que experimentemos sensaciones de ardor o dolor, aunque esto suele ocurrir tan solo en algunas ocasiones. Por ese motivo, es preciso que sepamos distinguir los síntomas para poder actuar correctamente, sin perjudicar al recién nacido.
Una de las razones por las que es posible sentir dolor en los pezones al darle la teta a tu bebé puede ser porque no está sujetando bien el pezón. Lo cual es muy simple de solucionar acostumbrando al pequeño a agarrar bien el pezón con su boca desde la primera mamada.
En caso que no esté succionando bien, puedes ayudarlo bajando su barbilla en el momento que está lactando para que el pezón choque de forma directa con su paladar. Además, su cabeza debe estar ligeramente inclinada hacia atrás y no así hacia adelante, de lo contrario la mala posición no le permitirá al pequeño succionar como es debido. El bebé siempre debe que tomar el pezón entre su lengua y el paladar, nunca de otra manera.
Al mismo tiempo, hay que tener en cuenta que no solamente el pezón tiene que estar dentro de la boca del bebé, sino también la areola completa. Esto lo puedes conseguir acercando tu pecho a la boca del pequeño, para lograr que abra bien la boca. Cuando esto suceda, tienes que introducir la totalidad de la areola en la boca del bebé.
Por otra parte, si te duelen o arden los pezones durante o después de darle el pecho a tu bebé, existe la posibilidad de que poseas una infección producida por el hongo Cándida Albicans (candidiasis), la cual es bastante contagiosa pero puede remediarse  con algunas medicinas que te recetará tu médico.
Por eso, en cualquiera de los casos es importante consultar con tu médico, para que en función a los síntomas que presentas te pueda guiar en tu proceso de lactancia, corroborando que te encuentres sana para que tu bebé crezca saludable.

Los celos comunes ante la llegada de un hermanito

Ante la llegada de un hermano son muy normales los celos, sobre todo en niños de dos años en adelante ya que son sumamente sensibles a los cambios. Para ayudarles a superar dichos celos, los padres tenemos que hablar previamente con nuestro hijo y dejarle que toque el vientre de mamá. Y, lo más importante, cuando nazca el bebé, es necesario dedicarle más tiempo al hermano mayor para evitar que se sienta desplazado.
Los celos, una combinación de amor y odio muy complicada de tolerar, representan un sentimiento natural. Los cuales pueden expresarse de diferentes maneras, a través de berrinches, llanto, irritabilidad, o mediante otro tipo de acciones, como hacerse pis encima.
Por eso, sin importar la edad que tenga su hijo, los padres deben explicarle a él que va a tener un hermano. No es bueno esconder aspectos tan evidentes como el embarazo, ya que resulta contraproducente.
Hay que dejar al niño que toque el vientre de su mamá. También,  pueden mostrarle fotos suyas de cuando él era pequeño o mostrarle otros bebés para que se vaya haciendo una idea de lo que va a suceder.
En sí, lo que el niño espera es que llegue un compañero de juego y no un bebé. De ahí que resulta indispensable explicarle la diferencia y que tendrá que pasar un tiempo hasta que puedan jugar juntos. 
Para el hermano mayor, el bebé, a quien ve como un invasor de su territorio, demanda mayor atención y el tiempo de sus padres. En estos casos, es conveniente  reservar un espacio para el juego para el hermano mayor, dándole al pequeño un espacio amplio con sus juguetes y enseñándole que hay zonas que deben ser respetadas. Y siempre hay que dejar bien claro que no se permite ningún tipo de agresión.
Al mismo tiempo, los padres deben intentar repartirse el tiempo dedicado a los hijos. De ese modo, mientras uno se dedica al bebé, el otro puede dedicarse a los hermanos mayores acompañándoles en sus actividades diarias.
Si bien al comienzo la llegada de un hermanito es una situación un tanto difícil para el o los hijos mayores, con el tiempo se vuelve una experiencia maravillosa. Lo fundamental es demostrarles mucho cariño, ya que eso les da seguridad y les ayuda a crecer y a ser independientes.

Cayetana de Alba y Alfonso Díez podrían adoptar un bebé

Cayetana de Alba y Alfonso Díez podrían adoptar un bebé

Cayetana de Alba y Alfonso Díez podrían adoptar a un bebé. La verdad es que la pareja formada por Cayetana de Alba y por Alfonso Díez es de lo más peculiar dada la diferencia de edad que existe entre ambos, y es que, son muchas las personas que no creen en un amor en el que existe una gran diferencia generacional. Sin embargo, los protagonistas han hablado con hechos a lo largo de estos más de dos años de relación por ello, en sólo dos semanas se darán el sí quiero en Sevilla. Un enlace que es de lo más esperado y que ha de ocupar páginas enteras de la prensa rosa.

De momento, se conocen algunos detalles como que más allá de la discreción que rodea a este enlace, la guapa Carmen Tello, una gran amiga de la Duquesa será la madrina. Pues bien, los hijos de la Duquesa también estarán allí para apoyar a su madre más allá de la oposición que han mostrado en el pasado por este amor que parece crecer cada día y que sin duda, ha rejuvenecido a Cayetana de Alba. Y es que el hecho de tener una ilusión y un amor no sólo es un motor positivo en la madurez sino también, en la juventud. Pues bien, parece que la pareja también está pensando en ampliar la familia.

Todo esto puede parecer un tanto surrealista pero la noticia ha sido aportada por Paloma García Pelayo en El programa de Ana Rosa, es decir, se trata de una fuente de calidad. Alfonso Díez supuestamente podría tener una ilusión especial por adoptar a un bebé. Sin embargo, no sabemos si los trámites legales permiten adoptar a un niño cuando los padres tienen tal madurez. Y es que, aunque  Alfonso Díez es mucho más joven que la Duquesa de Alba la verdad es que tampoco es un chaval. Es decir, de hecho, tampoco le quedan tantos años para jubilarse. Veremos si esta noticia se confirma o se desmiente. De momento, habrá que dar tiempo al tiempo. ¿Qué opinas sobre esta cuestión? Anímate, y comparte tu opinión.

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