Hinchazón de las piernas durante el embarazo

 

Durante el embarazo, en especial en el último trimestre e incluso hasta dos semanas después del parto; tener las piernas hinchadas, al igual que los tobillos y pies, es algo más que común, pudiendo además sentir dolor en las articulaciones.
La hinchazón se ve intensificada sobre todo en los días cálidos y húmedos, al final del día, tras permanecer mucho tiempo parada o sentada, si se ha subido demasiado de peso, si se trata de un embarazo múltiple, entre muchas otras razones. Lo normal, es que la mayor parte de esta hinchazón desaparezca después de dormir por la noche.
La causa de la hinchazón se debe a que los tejidos tienen que resistir el desarrollo del bebé y el parto, de modo que producen y acumulan líquidos, los cuales a su vez provocan hinchazón o edema en las piernas, tobillos y pies, aunque en ocasiones suele darse también en las manos y la cara.
Para aliviar dicha hinchazón  es necesario evitar permanecer mucho tiempo de pie o sentada, no cruzar las piernas al sentarse, intentar mantener elevados los pies aunque sea un rato al día, al dormir recostarse siempre sobre el lado izquierdo del cuerpo para facilitar la circulación sanguínea, realizar caminatas diarias, hacerse masajes, evitar el uso de ropa ajustada, utilizar calzado cómodo y sin tacón, usar medias especiales que den soporte, reducir la cantidad de sal en las comidas, beber al menos 2 litros de agua al día,  y no tomar medicamentos para reducir la hinchazón, excepto por prescripción médica.
En caso de padecer síntomas como hinchazón severa, una pierna visiblemente más hinchada que la otra y dolor a la altura de los muslos, hinchazón en manos y cara, dolores de cabeza intensos, visión borrosa, mareos o dolos agudo en el abdomen, se debe recurrir con rapidez al médico.

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Cómo prevenir la aparición de hongos en la boca del bebé

La boca del bebé recién nacido es una zona muy proclive para la aparición de hongos, como la «candida albicans«, un hongo que aparece en la boca del bebé y ocasiona una infección llamada «muguet«. Normalmente, no genera molestias al bebé, pero debe tratarse para que no provoque dolores en el pecho de la madre.
En ocasiones, se puede observar en el labio superior del bebé un pequeño callo que se desprende cada tanto. Es algo habitual en los bebés amamantados y desaparece con el tiempo, especialmente con el uso de la cuchara.
Según la zona donde aparece, el muguet recibe distintos nombres, como «sapillo», «hollín», «aljolí.
Para prevenir su aparición, si el bebé utiliza biberones o chupetes , resulta conveniente hervirlos con frecuencia para erradicar los hongos.
 Se debe tener especial cuidado en caso que la madre padezca una vaginitis o si se encuentra tomando antibióticos, ya que de la madre pueden contagiarse al bebé.
Para el tratamiento de estos hongos, el pediatra seguramente recomendará un líquido o una pasta que contenga un antimicótico para aplicar en la boca siempre después de las tomas para que permanezca por más tiempo en la boca.
Con respecto a las complicaciones que pueden surgir en una infección de este tipo residen en la aparición de hongos en heces, las cuales pueden causar una dermatitis del pañal muy molesta y complicada de aliviar si no se conoce la causa. Otra de las complicaciones es el contagio del pecho de la madre, quien puede llegar a sentir un intenso dolor en los pechos en cada toma. La candidiasis mamaria es bien molesta, por lo que se precisa tratar al bebé y a la madre a la vez.

Cómo prevenir la aparición de várices en el embarazo

Para prevenir las indeseables varices durante el embarazo es aconsejable descansar bastante, en lo posible con las piernas en alto, y usar pantys especiales para embarazadas. Además, la gimnasia para embarazadas y una alimentación saludable rica en vitamina C estimulan la buena circulación de la sangre, lo cual sirve para prevenir la  aparición de varices.
Un problema muy común en la gestación es el reblandecimiento de las venas. Las varices comienzan a aparecer cuando las válvulas que se ocupan de mandar sangre a las venas desbordan a causa de la mayor cantidad de sangre que recorre el cuerpo de la embarazada. La acumulación de sangre se da sobre todo en la parte inferior del cuerpo, es decir, en las piernas.
Si bien este problema posee tratamiento, es importante tratar de prevenirlas, siendo aconsejable no pasar demasiado tiempo de pie y descansar lo suficiente.
Realizar algunos ejercicios, como gimnasia para embarazadas así como la ingesta de alimentos ricos en vitamina C, mejora la circulación. Otra recomendación: al sentarte, tienes que tratar de no cruzar las piernas, porque dicha postura entorpece la circulación sanguínea.
Otra cuestión a tener en cuenta durante el embarazo es que las varices pueden aparecer, además de en las piernas, en la vagina. La hinchazón en esta parte del cuerpo es demasiado molesta, para lo cual es de ayuda aplicar hielo envuelto en un trapo. De todas maneras, es bueno saber que esta clase de varices desaparece luego el parto.

Causas y efectos del síndrome alcohólico fetal

El síndrome alcohólico fetal, producido por la ingesta de alcohol durante el embarazo, representa un cuadro que ocasiona malformaciones congénitas en el bebé. Según datos estadísticos, alrededor del 32% de los hijos de madres bebedoras presenta malformaciones, las cuales afectan a características físicas, como por ejemplo bajo peso al nacer, o a nivel psicológico, como retraso mental. Por esta razón, resulta de vital importancia evitar el consumo de alcohol durante el proceso de gestación.
El síndrome alcohólico fetal suscita malformaciones a causa de la acción del alcohol en el desarrollo del embrión y el feto. Y si bien se desconoce el mecanismo exacto que lo genera, se cree que tiene relación con el metabolismo del Zinc.
Este cuadro malformativo se manifiesta en el retraso del desarrollo antenatal y postnatal, afectando al peso, la talla y al perímetro craneal; anomalías de la cara, como  epicantus, mandíbula y maxilares hipoplásicos, ojos pequeños y labio superior fino; defectos cardíacos, ciertas alteraciones osteoarticulares, así como retraso madurativo y deficiencia mental.
Ahora bien, cabe preguntarse si este cuadro de síndrome alcohólico fetal posee tratamiento. Y la respuesta es, por cierto, negativa. No existe ningún tipo de tratamiento para este tipo de cuadro ya que no resulta posible reparar el daño ya ocasionado.
Lo que sí es verdad es que puede evitarse. De ahí que se recomienda no ingerir alcohol durante el embarazo.

La importancia del chequeo médico antes de buscar un embarazo

Antes de intentar quedarse embarazada, sobre todo en casos en que las mujeres hayan tenido problemas en embarazos previos o que padezcan diabetes u otras enfermedades crónicas, resulta aconsejable hacerse un chequeo médico bien completo.
El chequeo es muy importante como medida preventiva, ya que el especialista puede realizar un estudio de la historia clínica de la mujer, para descartar de ese modo posibles infecciones o cualquier otro problema.
Por ejemplo, con un simple análisis de sangre se puede detectar el nivel de inmunidad de la mujer ante enfermedades tales como la Rubéola. En el caso que la mujer no haya pasado ya esta enfermedad y, por lo tanto, no exista inmunidad, se debe vacunar y esperar para buscar un embarazo por lo menos unos tres meses.
Al mismo tiempo, se puede detectar si se es inmune o no a otras enfermedades, como por ejemplo la Toxoplasmosis, una infección leve que puede ocasionar daños significativos al feto. Por ello, a las futuras madres se les aconseja no ingerir embutidos y carnes crudas o poco cocidas, además de evitar el contacto con excrementos de gatos.
Por otro lado, la consulta al médico también permitirá determinar la existencia o no de anticuerpos de la Hepatitis B, de la Varicela y demás infecciones vaginales y/o del aparato urinario.
A su vez, es de suma importancia revisar el estado de la boca previo a un embarazo, ya que una boca sana evita posibles infecciones que pueden afectar al resto del organismo. Vale aclarar, que tales cuidados se tienen que mantener durante la gestación, porque las afecciones bucales pueden producir partos prematuros así como un mayor riesgo de padecer Preeclampsia.
En tanto que el futuro padre también es preciso que se someta a un estudio clínico para la detección de posibles enfermedades o infecciones, además de efectuarse un espermograma, un análisis seminal a través del cual se determina la calidad y la cantidad de espermatozoides. También, se evalúan las particularidades físicas del semen, su aspecto, volumen, viscosidad y consistencia.

¿Cómo prevenir la mastitis?

Algunas madres, tras el parto, sufren de mastitis. Pero ¿qué es la mastitis?, se preguntarán ustedes. Consiste en una infección de uno o ambos senos, la cual es provocada por la penetración de los gérmenes de la piel en los conductos glandulares de la mama. Dicho problema es bastante frecuente entre las mujeres en período de lactancia, debido a que durante el mismo se forman grietas en el pezón que favorecen el ingreso de los mismos.
Sin embargo, la mastitis puede prevenirse ¿De qué manera? Aunque no lo crean, dando el pecho al bebé con mayor frecuencia. No hay que dejar pasar mucho tiempo entre una toma y otra, y si observas que está muy congestionado, es recomendable ayudarse con un sacaleches.
Al mismo tiempo, es preciso cuidar mucho la higiene. Con una ducha diaria alcanza, pero también puedes lavar con agua tibia el pezón en el momento previo y posterior de cada toma, evitando el uso de jabón u otros productos irritantes. Luego de cada lavado, coloca una gasa esterilizada, y en caso que notes que hay segregación de leche, cámbialo cuantas veces lo creas necesario, ya que los senos tienen que permanecer secos.
Por último, es conveniente utilizar un sostén que sea un poco holgado, debiendo cambiártelo cada vez que salga leche. En caso que presentes síntomas intensos como escalofríos, fiebre o mucho dolor, visita a tu médico para que te recete un medicamento. Tengan en cuenta que la mastitis puede producirse en un solo seno, por lo que es posible  continuar dando de lactar al bebé con el otro, y en caso que los dos senos se vean afectados, lo mejor es vaciarlos con el sacaleches.

Como prevenir los accidentes en los bebes de 6 meses

Este es el período en que los bebés pueden tener menos accidentes que en el resto de su infancia, debido que la madre esta constantemente atento a él. Pero de igual manera hay que tener ciertos recaudos para que los accidentes no ocurran ya que pueden llegar a ser muy graves.

A continuación les daré algunos consejos para evitar los accidentes en bebes menores de 6 meses.

Prevenir Quemaduras:

  • Evite la ingesta de bebidas calientes cuando tiene al niño en brazos
  • Veifique la temperatura del agua del baño, antes de ingresarlo a la bañera
  • Mantenga fuera del alcance del bebé líquidos calientes, como tazas u ollas

Prevenir Caídas:

  • La cuna es un lugar seguro a esta edad.
  • Asegure las barandas de la cuna y que la distancia entre ellos sea inferior a 6 cm
  • Nunca deje al bebé solo en la bañadera
  • Prepare todo lo necesarios antes del baño

Prevenir sofocamientos:

  • Aleje del bebe, bolsas de plástico, cuerdas, teléfonos, correas.
  • Elija un colchón firme y una sábana liviana
  • Aleje la cuna de los cordones de la cortina.

Prevenir en el automovil:

  • Nunca te movilices en el asiento delantero con tú bebe
  • Utiliza la silla de auto correcta, según la edad y el peso de tu bebe