El síndrome del niño zarandeado

El síndrome del niño zarandeado

La violencia es una verdadera tragedia de una sociedad avanzada y desarrollada. Lo cierto es que según afirman los expertos, la violencia aumenta como consecuencia de la pobreza. Pero además, también tiene muchos matices y dimensiones. El reto de España es reducir a cero el maltrato doméstico que es consecuencia entre otras cosas del machismo.

Es incomprensible que en nuestros días todavía mueran mujeres en manos de sus parejas. Sin embargo, como la violencia no tiene límite también existen casos de mayores que no reciben el buen trato y el cariño que merecen. Por otra parte, la violencia también abarca casos de jóvenes adolescentes que tienen atemorizados a sus padres. No existe nada más difícil de entender que la violencia dentro del hogar porque se trata de un comportamiento que es contrario al amor.

Ese amor que nos ayuda a cuidar y a proteger a aquellos que queremos de verdad. Pues bien, en este sentido, conviene matizar que los bebés también son posibles víctimas de maltrato. Así lo muestra el síndrome del niño zarandeado. Se trata de los casos de bebés que sufren algún tipo de secuela como consecuencia de los movimientos agitados de  zarandeo sufridos por parte de sus padres. En algunas ocasiones, los padres se ven desbordados por el llanto constante del bebé, abrumados por esta situación optan por sacudir al bebé en un intento de que este deje de llorar. Está claro que se trata de una actitud perjudicial que puede producir grandes daños.

Un niño necesita amor y cariño. Pero además, conviene matizar que no se detectan todos los casos de violencia infantil. El síndrome del bebé zarandeado se puede prevenir en la medida en que los padres se conozcan a sí mismos de verdad. Es decir, en la medida en que se den cuenta de que su paciencia se está agotando es mejor delegar, y volver a retomar la labor con energía una vez que se ha descansado.

Sin duda, esperemos que la violencia en todas sus formas termine pronto y que todos los bebés puedan crecer en un hogar estable y feliz. ¿Qué opinas sobre esta cuestión?

Imagen: Entre Padres

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Cómo prevenir la aparición de hongos en la boca del bebé

La boca del bebé recién nacido es una zona muy proclive para la aparición de hongos, como la «candida albicans«, un hongo que aparece en la boca del bebé y ocasiona una infección llamada «muguet«. Normalmente, no genera molestias al bebé, pero debe tratarse para que no provoque dolores en el pecho de la madre.
En ocasiones, se puede observar en el labio superior del bebé un pequeño callo que se desprende cada tanto. Es algo habitual en los bebés amamantados y desaparece con el tiempo, especialmente con el uso de la cuchara.
Según la zona donde aparece, el muguet recibe distintos nombres, como «sapillo», «hollín», «aljolí.
Para prevenir su aparición, si el bebé utiliza biberones o chupetes , resulta conveniente hervirlos con frecuencia para erradicar los hongos.
 Se debe tener especial cuidado en caso que la madre padezca una vaginitis o si se encuentra tomando antibióticos, ya que de la madre pueden contagiarse al bebé.
Para el tratamiento de estos hongos, el pediatra seguramente recomendará un líquido o una pasta que contenga un antimicótico para aplicar en la boca siempre después de las tomas para que permanezca por más tiempo en la boca.
Con respecto a las complicaciones que pueden surgir en una infección de este tipo residen en la aparición de hongos en heces, las cuales pueden causar una dermatitis del pañal muy molesta y complicada de aliviar si no se conoce la causa. Otra de las complicaciones es el contagio del pecho de la madre, quien puede llegar a sentir un intenso dolor en los pechos en cada toma. La candidiasis mamaria es bien molesta, por lo que se precisa tratar al bebé y a la madre a la vez.

Nueva técnica no invasiva para la detección de anomalías congénitas cardíacas en los recién nacidos

Hay una prueba rápida y no invasiva, que sirve para medir los niveles de oxígeno en sangre en los recién nacidos y que puede detectar más casos de anomalías congénitas cardiacas que los hasta ahora detectados por los actuales métodos.
De acuerdo a un estudio que fue publicado en The Lancet, una publicación británica, tendría que implementarse como examen de rutina en los recién nacidos antes de ser dados de alta en la maternidad.
Actualmente, los defectos congénitos cardíacos constituyen una de las principales causas de fallecimiento de bebés.
Las técnicas de detección que existen actualmente consisten en una ecografía de ultrasonidos, efectuada durante el primer trimestre de gestación, y un examen físico rutinario luego del nacimiento. Sin embargo, a pesar de todo ello, una cifra importante de niños no es diagnosticada y son dados de alta sufriendo después complicaciones o incluso la muerte.
El estudio realizado en el Reino Unido, ha medido el papel de la oximetría de pulso en la detección de las cardiopatías congénitas en un gran número de recién nacidos. La oximetría del pulso o, lo que es lo mismo, la pulsioximetría consiste en la medición, no invasiva, del oxígeno que es transportado por la hemoglobina en los vasos sanguíneos.
Gracias a esta prueba, se ha conseguido detectar el 75% de los casos críticos y el 49% de las cardiopatías congénitas mayores. De este modo, la tasa de detección de la oximetría de pulso ha sido del 58% de los casos críticos y el 28% de los casos importantes.
Según los especialistas que llevaron a cabo dicho estudio, la oximetría de pulso es una prueba no invasiva, factible y razonablemente precisa, que resulta más efectiva que la del diagnóstico prenatal y la exploración clínica convencional. En realidad, representa un valor agregado a las técnicas ya existentes y puede que resulte útil para la detección de los casos críticos de defectos congénitos del corazón, que de otro modo no se podrían detectar.

Cómo prevenir la aparición de várices en el embarazo

Para prevenir las indeseables varices durante el embarazo es aconsejable descansar bastante, en lo posible con las piernas en alto, y usar pantys especiales para embarazadas. Además, la gimnasia para embarazadas y una alimentación saludable rica en vitamina C estimulan la buena circulación de la sangre, lo cual sirve para prevenir la  aparición de varices.
Un problema muy común en la gestación es el reblandecimiento de las venas. Las varices comienzan a aparecer cuando las válvulas que se ocupan de mandar sangre a las venas desbordan a causa de la mayor cantidad de sangre que recorre el cuerpo de la embarazada. La acumulación de sangre se da sobre todo en la parte inferior del cuerpo, es decir, en las piernas.
Si bien este problema posee tratamiento, es importante tratar de prevenirlas, siendo aconsejable no pasar demasiado tiempo de pie y descansar lo suficiente.
Realizar algunos ejercicios, como gimnasia para embarazadas así como la ingesta de alimentos ricos en vitamina C, mejora la circulación. Otra recomendación: al sentarte, tienes que tratar de no cruzar las piernas, porque dicha postura entorpece la circulación sanguínea.
Otra cuestión a tener en cuenta durante el embarazo es que las varices pueden aparecer, además de en las piernas, en la vagina. La hinchazón en esta parte del cuerpo es demasiado molesta, para lo cual es de ayuda aplicar hielo envuelto en un trapo. De todas maneras, es bueno saber que esta clase de varices desaparece luego el parto.

Causas y efectos del síndrome alcohólico fetal

El síndrome alcohólico fetal, producido por la ingesta de alcohol durante el embarazo, representa un cuadro que ocasiona malformaciones congénitas en el bebé. Según datos estadísticos, alrededor del 32% de los hijos de madres bebedoras presenta malformaciones, las cuales afectan a características físicas, como por ejemplo bajo peso al nacer, o a nivel psicológico, como retraso mental. Por esta razón, resulta de vital importancia evitar el consumo de alcohol durante el proceso de gestación.
El síndrome alcohólico fetal suscita malformaciones a causa de la acción del alcohol en el desarrollo del embrión y el feto. Y si bien se desconoce el mecanismo exacto que lo genera, se cree que tiene relación con el metabolismo del Zinc.
Este cuadro malformativo se manifiesta en el retraso del desarrollo antenatal y postnatal, afectando al peso, la talla y al perímetro craneal; anomalías de la cara, como  epicantus, mandíbula y maxilares hipoplásicos, ojos pequeños y labio superior fino; defectos cardíacos, ciertas alteraciones osteoarticulares, así como retraso madurativo y deficiencia mental.
Ahora bien, cabe preguntarse si este cuadro de síndrome alcohólico fetal posee tratamiento. Y la respuesta es, por cierto, negativa. No existe ningún tipo de tratamiento para este tipo de cuadro ya que no resulta posible reparar el daño ya ocasionado.
Lo que sí es verdad es que puede evitarse. De ahí que se recomienda no ingerir alcohol durante el embarazo.

Factores que influyen en el ritmo de crecimiento de los niños

El crecimiento de bebés y niños constituye una de las cuestiones que más nos desvelan a los padres, sobre todo durante los primeros años. Una alimentación sana y equilibrada es fundamental para el adecuado crecimiento de los niños. Incluso, el sueño es otro de los factores que ejerce su influencia, de manera notable, en el desarrollo de nuestros hijos. También, la genética y la presencia de algunas enfermedades pueden ser determinantes en cuanto al ritmo de crecimiento.
La mayoría de los padres solemos preocuparnos sobre cómo crecen nuestros hijos,  y realizándonos planteos del tipo: ¿estará creciendo correctamente?, ¿se alimenta bien?, ¿su peso es el adecuado?
Hay una serie de factores que determinan el ritmo de crecimiento de los niños, como por ejemplo la herencia genética, la alimentación y el sueño, así como las enfermedades que puedan contraer durante sus primeros años de vida.
En este orden, la cuestión genética  es importante ya que los genes inciden en nuestro peso y talla. Por lo que si los padres son altos, es muy probable que el bebé también lo sea.
Con respecto a la alimentación, ésta también posee un papel relevante en el crecimiento de los bebés. Tanto la leche materna como la de fórmula aportan todos los nutrientes necesarios para el desarrollo y crecimiento adecuado de nuestros hijos. Lo realmente importante es que se debe comprobar que el bebé aumenta de peso con regularidad.
En tanto que en los niños más grandes, una alimentación saludable y equilibrada también es fundamental para su desarrollo físico e intelectual.
Por su parte, el sueño desempeña una función reparadora en los bebés, debido a que durante el mismo el organismo segrega la hormona de crecimiento. Por lo que resulta sumamente importante respetar sus horarios de sueño.
Cabe aclarar que existen graves enfermedades, como la celiaca,  que pueden retardar el proceso de crecimiento del bebé.
Teniendo en cuenta ello, es indispensable que ante la menor duda acerca del crecimiento de nuestros niños consultemos con el pediatra, quien sabrá detectar cualquier tipo de anomalía y encarar, así, el tratamiento correspondiente.

Cómo darse cuenta si el bebé está bien abrigado

A veces, a las madres, sobre todo las primerizas, nos cuesta darnos cuenta si el bebé está bien abrigado o no. Por eso, para saber si un recién nacido se halla abrigado de manera apropiada, no alcanza con tocar sus manos o pies, debido a que estos suelen encontrarse fríos a causa de la inmadurez de su aparato circulatorio. Siempre las piernas, los brazos o el cuello nos irán a indicar mejor su temperatura corporal. Un dato a considerar, cuando hace calor, es preciso observar su sudoración.
La mayor parte de los bebés, por lo general, tiene las manos y los pies fríos, ya que su circulación sanguínea aún no se encuentra del todo desarrollada. De todos modos, esto no quiere decir necesariamente que el bebé sienta frío.
El mejor modo de averiguar si precisa más abrigo reside en tocarle las piernas, los brazos o el cuello.  A su vez, la pérdida de color en las mejillas también puede ser un indicativo de que el bebé está teniendo frío.
Al contrario de lo que se cree, no deben abrigarse en exceso a los bebés, porque su cuerpo puede sufrir la pérdida de la capacidad de adaptación a las variaciones de temperatura y, en consecuencia, resfriarse más fácilmente.
En vez de una sola prenda muy abrigada, resulta conveniente vestirle con varias prendas de menor grosor, porque entre ellas se irán a formar capas aislantes y el bebé se sentirá más abrigado. Por consiguiente, si la temperatura asciende, podrá quitársele de a una las prendas sin necesidad de cambiarle toda la ropa.
En los meses de calor, es conveniente vestir al bebé con prendas de algodón  que, además de ser livianas, equiparan los cambios de temperatura.
El calor excesivo puede hacer que el bebé posea la cabeza sudorosa o que se le vea apático y decaído. De ser así, lo mejor es llevarle a una habitación fresca, sacarle la ropa y hacerle beber mucho líquido. Si, a pesar de ello, continúa igual, es fundamental consultar con el pediatra de inmediato.

La ingesta de vitaminas podría reducir los casos de partos prematuros y de bebés de bajo peso

Según un estudio, que fue publicado recientemente en el American Journal of Clinical Nutrition, tomar vitaminas antes y durante las primeras semanas de gestación podría servir de ayuda para reducir las posibilidades de parto prematuro y los nacimientos de bebés con bajo peso. De todas maneras, a pesar de los resultados, los investigadores aún no recomiendan su consumo en este periodo, debido a que es necesario llevar a cabo más estudios para estudiar de qué manera afectan las vitaminas a los bebés.
La toma de ácido fólico, previo a quedar embarazada y en los primeros tres meses de gestación, ayuda a prevenir defectos del tubo neural en el feto. A esto, ahora se le agrega que tomar complejos multivitamínicos antes de la gestación puede ayudar a reducir los partos prematuros y nacimientos de bebés de bajo peso.
El estudio, que fue llevado a cabo de manera conjunta por las universidades de Pittsburgh (EE.UU) y de Aarhus (Dinamarca), ha sido realizado a aproximadamente 36.000 embarazadas danesas. De acuerdo a lo arrojado por dicha investigación, se logró comprobar los efectos del consumo de vitaminas cuatro semanas antes y ocho semanas después de haberse producido la concepción.
No obstante, los investigadores coinciden en que es necesario proseguir con los estudios de los efectos de los suplementos multivitamínicos previo al embarazo, por lo que aún no se arriesgan a recomendar su consumo sin previa prescripción médica.
De acuerdo a los resultados obtenidos, la cantidad de partos prematuros, producidos antes de la semana 37, fue de un 4,3% en el grupo de mujeres que tomaba suplementos vitamínicos en contraste con el 5,35% del grupo que no tomaba ninguna clase de vitaminas. Tales diferencias, fueron observadas además en el peso y la talla del bebé. Es decir, que el grupo de madres que tomó multivitaminas fue menos proclive a tener un bebé pequeño conforme a su edad gestacional.
Según lo señalado por los científicos, existían ciertas diferencias entre ambos grupos asociadas especialmente al estilo de vida, como por ejemplo una alimentación inapropiada o el consumo de tabaco. Conforme a ello, el grupo que tuvo peores resultados llevaba una vida menos saludable, lo cual podría dificultar la absorción de alimentos así como favorecer los casos de partos prematuros y el bajo peso al nacer.
De todos modos, a pesar de los resultados positivos que arrojó el estudio, los investigadores todavía no recomiendan tomar complejos multivitamínicos sin prescripción médica debido a que aún se desconocen los efectos que éstos podrían causar en el bebé.

Cómo combatir la sudamina en los bebés durante los meses de calor

Los bebés que nacen durante el verano suelen presentar granitos en su piel a causa de las elevadas temperaturas. Ese sarpullido o sudamina consiste en una alteración de la piel, que no reviste importancia, más allá de que es un poco antiestética. Es de vital importancia no confundirla con otras afecciones infantiles en las que puede aparecer un sarpullido en la piel, razón por la cual es conveniente realizar una consulta con el pediatra.
A pesar que es muy común durante los primeros meses de vida de los bebés, la sudamina puede aparecer también en niños mayores cuando la temperatura sube por encima de los 30 ºC. Por lo general, los granitos aparecen de manera dispersa o, bien, juntos formando ronchas de tono rojizo, pudiendo producir picazón producto de que la piel se encuentra inflamada.
Los granitos que produce la sudamina aparecen cuando la piel del pequeño impide salir el sudor y éste resulta retenido en las capas de la dermis, dando lugar a pequeños granitos rojos. Cuando se trata de una sudamina leve, las ampollas diminutas se rompen con facilidad y se forman costras. Pero si el calor persiste, los granitos rojos pueden producir picazón y reaparecer comúnmente en diferentes partes del cuerpo, siendo las más habituales: la frente, las mejillas, los párpados y la nariz. Aunque también suelen brotar en los brazos, la nuca y en el tronco superior, además de la zona del pañal y en los muslos.
La que se recomienda para mantener al bebé libre de sudamina es evitar que sude, algo que en el verano se torna muy difícil con la subida de las temperaturas. De modo que para ayudar a mantener fresco al bebé se aconseja cambiarle el pañal con frecuencia,  para que no acumule calor y humedad, bañarlo solamente con agua, sin usar gel o jabones que puedan provocar la irritación de su piel, secarlo con suaves toques,  para absorber la humedad de su piel, y vestirlo con ropa liviana, evitando  ponerle ropa ajustada.
Además, resulta recomendable conservar el ambiente fresco, evitar la exposición directa y prolongada al sol, y tocar la nuca del bebé para saber si está acalorado.
Cuando aparecen los granitos de la sudamina, aparte de aplicar todas las medidas preventivas para evitar que se agraven, el pediatra puede recomendar una crema con cortisona, en los casos más severos.

Medidas para prevenir la muerte súbita en los bebés

Es posible diagnosticar la muerte súbita e incluso prevenirla, pero hasta el día de hoy se desconoce a ciencia cierta el por qué ocurre. La muerte súbita representa una de las causas  principales de fallecimiento de lactantes de entre un mes y un año de vida.
Si bien los casos de este síndrome han mermado, gracias a los esfuerzos de prevención establecidos por diferentes organizaciones, aún continúa siendo un problema que ocasiona un profundo dolor a muchos padres y familias.
Sinceramente, nadie espera que algunos bebés, en apariencia sanos, mueran de ese modo, de forma tan repentina como inexplicable. Según los últimos estudios realizados por el Instituto Nacional de Desarrollo Humano y Salud Infantil de los Estados Unidos, revelan que la muerte súbita podría tener una relación directa con una alteración en el funcionamiento cerebral, debido al desequilibrio que produce en la respiración, en la temperatura corporal y en el despertar del sueño del bebé. No obstante, todavía queda mucho camino por recorrer para llegar a comprender y conocer los verdaderos mecanismos que provocan que algunos bebés mueran súbitamente. Las estadísticas indican que el 90% de los casos se da en lactantes de entre dos y seis meses de edad, sobre todo en los meses invernales.
Cabe destacar que existen medidas para hacer que el sueño del bebé sea más seguro, las cuales desde que han sido adoptadas consiguieron disminuir el riesgo de Síndrome Muerte Súbita en Lactantes (SMSL) hasta en un 70%. Tales medidas comienzan por la mejor posición para acostar al bebé, al que se recomienda acostarlo boca arriba, en un colchón firme y sin almohada; dejando los brazos, las manos y la cabeza del bebé fuera de la ropa de cama, bien al descubierto. Hay que cuidar de no abrigarlo de manera excesiva y mantenerlo con una temperatura lo suficientemente cálida.
Al mismo tiempo, no se debe admitir que nadie fume en el cuarto del bebé ni en el interior de la casa, además de darle leche materna tantas veces lo pida.
Cuando un bebé muere de manera repentina, para poder confirmar que se trato de un caso de SMSL, es necesaria una historia clínica detallada del bebé, además de la realización de la autopsia, de una investigación familiar y del entorno del pequeño, y un estudio local de la situación.